Disco Inmortal: Helmet – Meantime (1992)
Interscope Records / Amphetamine Reptile, 1992
Dentro de la música, siempre se dan casos especiales en que la influencia pasa a ser más evidente que la repercusión del éxito alcanzado, incluso a lo largo de la historia del rock y sus distintas épocas, nos encontramos con nombres importantes que, pese a no tener una gran popularidad y conforme al paso del tiempo, se han ido transformando en bandas de culto. Este es el caso de los neoyorquinos Helmet, un grupo con sonido potente, pero de apariencia sencilla y que siempre lograron mantenerse al margen del Mainstream reinante de los gloriosos años noventa.
La banda, liderada por el gran Page Hamilton, con su segundo álbum “Meantime” (1992), lograría revolucionar la escena, con una propuesta genuina, que en un principio resultaba difícil de clasificar, ya que contenía guitarras pesadas tomadas del metal pero con una actitud rabiosa de Hardcore, lo que a la larga los convertiría en una influencia trascendental para las nuevas bandas que surgirían años más tarde.
Una de las primeras cosas que destacan dentro de este inmenso disco, es el notable aporte de cada miembro al sonido de la obra. El baterista John Stainer, por ejemplo, realiza un trabajo notable con ritmos extrañamente estructurados, pero impresionantemente técnicos, lo que agrega un barniz especial a cada una de las pistas. Es muy importante también la labor desarrollada por Henry Bogdan en el bajo, quien logra un sonido espeso y de tono oscuro que se complementa a la perfección con el maravilloso trabajo en guitarras, a cargo de Peter Mengedes y Page Hamilton.
La canción encargada de abrir el álbum es “In the Meantime”, con un comienzo muy al estilo Noise Rock, brevemente ruidoso y seguido de un riff de guitarra con ritmo pegadizo, el cual da un pase maestro a la voz rabiosa e inhumana de Hamilton, quien suena como una bestia enjaulada gritando su profunda rabia. Indudablemente, este es un comienzo denso, pero lleno de onda, que nos advierte la joya de disco que tenemos enfrente y nos prepara para una intensa experiencia de sonido.
Si en las pistas iniciales “In the Meantime” y “Iron Head” se escucha la voz de Hamilton rabiosamente ruda, en canciones como «Give It” se presenta el contraste perfecto, con un trabajo vocal mucho más limpio, lo que le da otro sentido a la música, algo mucho más pulido, además se nota que Hamilton buscaba su propio estilo como vocalista y en este álbum logra mezclar de buena manera, lo disonante con lo melódico.
La agrupación, con este disco lograría muy buenos resultados, logrando alcanzar una pequeña accesibilidad comercial con una muy buena rotación en radios y especialmente en MTV, esto gracias a canciones como la genial “Unsung” en donde la voz limpia de Page vuelve a tomar gran protagonismo. El track es uno de los más accesibles y agiles del álbum y se acentúa esa extraña mezcla entre Black Sabbbath, Fugazi y Black Flag. Era que no, pues la marca de un catedrático del punk estaba a cargo: Steve Albini.
El riff es simple pero la canción alcanza la inmortalidad, logrando posicionarse como una de las mejores composiciones de la banda, infaltable en cualquier buen playlist de metal alternativo de los 90s.
Otras canciones destacadas de esta joya son la bellamente ruidosa «Turned Out» que, con ese duelo entre guitarras estridentes y la batería rompe oídos de Stainer, se corona como una de las más sobresalientes del álbum, por otro lado, “Better”, también hace lo suyo, aunque desde la vereda de la simpleza, mostrando un sonido preciso, lleno de groove, con mano dura en las partes de guitarra y una voz enojada que también se da espacio para partes melódicas.
Con este inmenso trabajo, Hamilton y Cía. logran sumergirnos en sonidos sumamente crudos, pero a su vez experimentales, en donde la experiencia de oír cada una de las diez canciones que lo componen, se transforma en un ejercicio demoledor pero muy satisfactorio; acá la banda, básicamente, creó su pequeña gran obra maestra, con la cual, influenciarían a la mayoría de las formaciones posteriores del metal alternativo.
Esta producción, hasta el día de hoy, suena fresca y potente, con una maestría musical áspera y amarga, pero de momentos elevados e intensos, además, este álbum es un buen punto de partida para cualquiera que desee conocer el sonido de Helmet, ya que “Meantime” es por lejos su trabajo más sólido y siempre será recordado como el mejor puto disco en la historia de la banda.
Por Carlos Bastías