Videografía Rock: «Te llevo para que me lleves» – Gustavo Cerati
Dir. Pablo Fischerman y Daniel Bohm
“Te conozco de otra vida / Hoy saldrás por la ventana”, dice la introducción del primer single de la carrera de Gustavo Cerati como solista. Corría 1993 y ‘Gus’ estaba viviendo el idilio soñado junto a su amor de toda la vida: Cecilia Amenábar. Disfrutaban salir juntos y sobre todo pasear por la Venezuela de los años 90’: “el otro día me acordaba cuando me salió el tema ‘Te llevo para que me lleves’. Más allá de una alegoría que plantea una cuestión de pareja y la espera de un hijo, el término lo escuché, o creí escucharlo, allá a lo lejos en una playa Venezuela. Yo escuchaba algo por el estilo en tono venezolano y me quedó sonando en la cabeza, entonces después lo traduje y quedó nomás”, describió el ex vocalista de Soda Stereo en el libro “Cerati en primera persona”
Para Gustavo, hacer videos eran momentos únicos. La pasaba bien o mal. En su caso la mayoría de las veces eran de una experiencia satisfactoria, pero hubo varios como la filmación de “La Ciudad de La Furia” en los cuales fue “uno de los más aburridos que recuerde”. Para él, realizar una suerte de cortometraje pretencioso en música era un momento en el cual solo “le quedaba de alternativa armarse de una paciencia infinita”. En el caso del single que lo hizo debutar en solitario, pero al alero de lo que realizaba con su banda, esgrimió que “yo prefiero los videos en que todo ocurre con más inmediatez y menos premeditación como ‘Te llevo para que me lleves’ o ‘No necesito verte’.
En este video se ve a Gustavo hacer de todo, sin dejar de mencionar que -como en todas las canciones de “Amor Amarillo”- la mayoría de los instrumentos fueron tocados y sampleados por él mismo. “Usé vestidos, hay un momento en que aparezco con un vestido en una pileta. En general a Cecilia le saqué el guardarropa, me ponía de todas las cosas de ella prácticamente”, mencionó Cerati sobre las vestimentas del tercer track de la placa publicada el 1 de noviembre de 1993.
“Una vida a otra vida… para que me lleves”
El video fue dirigido por Pablo Fischerman y Daniel Bohm, el cual realizaron en su totalidad en Chile, precisamente la Región Metropolitana. “Estaba viviendo el embarazo de Cecilia de lo que iba a ser o de lo que ya era Benito, mi primer hijo, y no teníamos mucho tiempo”, explicó en el libro que realizó la periodista Maitena Aboitiz. El disco estaba siendo finalizado por Gustavo y la modelo chilena tenía casi nueve meses de embarazo, lo cual le acotaba en demasía los momentos para realizar algo con paciencia, pero nada de aquello fue impedimento para que se fueran a la montaña a grabar el single.
“La verdad es que no hubo un guión, sino que había como escenas, eran escenas un poco soñadoras, ¿no? Bueno, fue todo muy divertido”, declaró Cerati. La guitarra que lo acompaña en el clip siembra una pequeña duda de la autoría del instrumento, pues escribió que es “de un cantautor chileno que en ese momento era el novio de Cecilia Bolocco y yo le puse todas las calcomanías y se la devolví”. Sin embargo, en 1993, cuando salió “Amor Amarillo” al mercado, la miss universo estaba casada con Michael Young quien era productor televisivo y Keko Yunge (supuesto cantautor) tuvo una suerte de romance a fines de los 90’. Una anécdota minoritaria, pero que se gestó gracias a “Te llevo para que me lleves”.