Against Me! en Chile: Épica punk
La banda liderada por Laura Jane Grace se despachó uno de los más potentes shows de punk rock del año en Chile
En una semana recién pasada que vivimos shows intensos de distinto calibre y estilos en la capital (Franz Ferdinand o Peter Murphy que brillaron con sendas actuaciones, por ejemplo), el lunes feriado -que funcionó como doble domingo- tuvimos la oportunidad de presenciar un show que sorpresivamente superó expectativas, tanto por novedad (primera vez en Chile y primer show en Sudamérica como lo anunciara la propia Laura Jane Grace, la vocalista trans y la «reina» de la fiesta de la cual ya hablaremos en detalle) y donde además demostraron en vivo una solidez y un repertorio que nos indica cuan rica es su discografía y carrera que ya lleva varios años de cancha (arrancaron desde fines de los noventa y ya cuentan con siete discos de estudio en el cuerpo, algunos de ellos, ya convertidos en emblemáticos del estilo, a la altura tanto de esa cosa épica honesta punk rock como Bad Religion o Millencollin ).
Y claro, un show de punk rock vaya que se aprecia en recintos chicos y el acierto de la productora Reaktivate fue realizarlo en el Domo San Diego, un local que hizo sonar increíble a los punk rockers de Florida y a la banda telonera, por cierto, Mondronauta, que con mucha actitud y fuerza empezaron a prender los fuegos. La banda nacional mostró material de su primer álbum haciendo mención por supuesto de su presencia musical en plataformas de streaming para que los vayamos conociendo y además avisando de su nueva producción que viene en camino.
Tras la actuación de los nacionales y alrededor de un tercio de hora era el turno del debut de Against Me! que no se hizo esperar mucho para arrancar de forma potentísima todo, con un show cargado a himnos, porque los estadounidenses han cultivado una forma de composición decantada a aquello, temas con mucha melodía y un espíritu escuela Descendents/Dead Kennedys, pero con una fuerza impresionante además, donde la batería (que monstruo en las batacas Atom Willard) los enérgicos riffs, letras introspectivas y de sentimiento enardecido, más el vozarrón de Laura son sus grandes armas de batalla.
La banda sometió al público desde el arranque con ‘Fuck My Life 666’ y ‘White Crosses’ y lo que se vino en adelante no fue más que una hora y media de sagrado punk rock, mostrando material de su nueva producción y viejos temas, en una verdadera misa de lo que debe ser un show de esta categoría, actitud plena y enfervorizada de la audiencia por ver a una de las bandas de la escena punk americana en su gran momento. Laura, se ve radiante y feliz, tanto por encontrarse con un público que verdaderamente ama su música como lo fue ayer, como también porque ella se siente muy bien consigo misma luego de haberse decidido al fin al liberador cambio de sexo. Se veía emocionada y muy agradecida y su entrega fue tal que se magnetizó por todo el Domo y la gente respondió a punta de Stage Divings, mosh, saltos y alegría pura.
Los clásicos llegaron dando emoción a full, con ‘I Was Teenage Anarchist’, una que no podía faltar y ahí estuvieron haciendo explotar el Domo con su emotiva frase «Do you remember when you were young and you wanted to set the world on fire?»; ‘True Trans Soul Rebel’ o ‘Black Me Out’ fueron puntos altos para el final demostrando cuanto cariño le tienen al «Transgrender Dysphoria Blues» (2014) y disco que marcó el cambio de Tom Gabel a Laura.
Hasta ahí parecía el momento final, pero la cosa dio para más, ya que a pedido del público la banda entró con cuatro canciones extra, incluyendo set acústico de Laura con ‘The Best Ever Death Metal Band in Dento‘ y la bella ‘Two Coffins’ y cerrar un show con estilo con ‘Baby, I’m Anarchist’ y ‘Sink, Florida, Sink’.
Fue casi religioso. Sonido, ambiente, ganas y emociones bilaterales dieron cumplido el sueño de muchos, gozar de una banda que transmite honestidad y una fuerza descomunal en vivo, por primera vez en suelos nacionales. Sin duda ya enmarcado dentro de lo mejor del año en vivo.
Por Patricio Avendaño R.