Blink-182 en Lollapalooza Chile 2024: Culto a la adolescencia

Fotos por Jerrol Salas

Foto: Travis Barker 

Tras la abrupta cancelación de su participación en la pasada edición de Lollapalooza Chile, había expectación y ansias por ver, finalmente, a una de las bandas que marcó la adolescencia de toda una generación, y con su formación original. Con un Travis Barker ya recuperado, el trío complementado por Tom DeLonge y Mark Hoppus estaba listo para entregar la experiencia pop punk de Blink-182 en vivo, pisando tierra local.

A las 21:00 punto se notaba una cantidad inmensa de gente frente al Cenco Malls Stage. Se podía notar que el público bordeada los 30 y 40 años, pero también había un porcentaje de adolescentes que, de seguro, entraron en sintonía con la banda por ver a la banda como una institución que está traspasándose de generación en generación.

Se habían pactado 90 minutos para la presentación de los californianos, siendo uno de los actos mayores del cartel y prometiendo una gran cantidad de canciones. Con «Anthem Part Two», «The Rock Show» y la clásica para tocar en vivo, «Family Reunion», la banda daba el golpe inaugural a lo que sería más de una veintena de canciones, en un extenso set.

El sonido y la actitud punk de la banda no son excusa para que esta descuide el factor visual en sus presentaciones. Todo lo contrario, ya que con entretenidas visuales y juegos de luces sincronizados con la música, se complementa una puesta en escena enérgica y potente. «Feeling This», «Violence» y «Reckless Abandon» demostraron la vigencia de los músicos, y el buen momento por el que están pasando.

Otro factor clave que implica la experiencia de ver a la banda en vivo, es el humor. Tom y Mark hacen constantes comentarios y bromas entre ellos que entretienen a la audiencia antes, durante o después de interpretar sus canciones, lo que es un gancho perfecto para mantener la atención en los músicos. «MORE THAN YOU KNOW», «DANCE WITH ME» y «EDGING», salían a defender «One More Time…», su álbum de reunión. «Aliens Exist» y «Happy Holidays, You Bastard» se escucharon fuerte y claro, rectificando que los álbumes «Take Off Your Pants And Jacket» y «Enema Of The State» son, a esta altura, clásicos atemporales.

Luego de «Stay Together for the kids» ocurrió uno de los momentos más graciosos de la presentación. Como suele suceder en eventos masivos, fue necesario hacer al público retroceder algunos pasos hacia atrás debido a desmayos en el público, pero, lamentablemente para el personal de seguridad, el público prefirió gritarle que no lo haría tras las indicaciones que daba (de una manera mucho más graciosa y vulgar que lo que se lee aquí), desatando la risa de todo el lugar. Finalmente, Tom se encargó de la situación y el show pudo continuar.

Más allá de todos los estigmas que podría tener el pop punk respecto a su ejecución musical, es necesario recalcar el profesionalismo de la banda en su interpretación. Travis Barker es un show en sí mismo; por lejos, uno de los mejores bateristas en la historia del rock, y toda una experiencia de presenciar en vivo. Mark y Tom siguen teniendo la misma voz de antaño, pero con un timbre mucho más maduro y controlado, que se nota en la maestría de sus armonías vocales. Lo mismo pasa con sus instrumentos, ya que el bajo y guitarra presentan un sonido gigante, pero donde todo se percibe con claridad. «Bored to Death», «I Miss You» y «What’s My Age Again?» se sumaron a la seguidilla de clásicos del set.

«First Date», «All The Small Things» y «Dammit» fueron los puntos más altos del concierto, y era de esperarse, ya que probablemente sean algunas de las canciones más conocidas del trío. Luego de una salida breve, la banda volvió para dar el cierre final con «ONE MORE TIME», dejando felices a las miles de personas que presenciaron la presentación.

Puede que haya sido una de las mejores presentaciones de la segunda jornada de Lollapalooza Chile 2024, tanto por su significado emocional para los fanáticos que asistieron, pero también por la calidad del espectáculo. Sería ideal poder verles nuevamente en una fecha en solitario, y, por qué no, con otra nueva producción bajo el brazo.