Es tan solo una pieza del brutal rompecabezas de auto destrucción de "Dirt" de Alice…
Cancionero Rock: «Check My Brain» – Alice in Chains (2009)
“Tears have filled my bones/ year’s expended gone/check my brain, check my brain”…
“Es como ser un mal jugador y vivir en Las Vegas. Está justo ahí. Es solo la ironía de eso y un poco de sarcasmo, que no está menospreciando este lugar en absoluto. Es como, wow, ya sabes, revisa mi cerebro, wow… Hay un cierto aspecto de sarcasmo, supongo, ser un chico de Seattle que vive en Los Ángeles, ex drogadicto que vive en el vientre de la bestia y no participa, y estoy totalmente de acuerdo con eso”, decía en ciertas declaraciones uno de los compositores más representativos de la escena grunge, Jerry Cantrell, creador de una composición explosiva, punto de inflexión en la historia de Alice in Chains, la oscura “Check My Brain” al sentir no pertenecer a ese lugar.
Letras oscuras y divagantes, la llamarada del poder de vuelta incrustada en esos riffs siniestros, sellos característicos de las composiciones de Alice in Chains, que estaban de regreso en este sencillo, lanzado como single el 14 de agosto del 2009, track incluido en el álbum “Black Gives Way to Blue”, el cual marcaba el retorno de los de Seattle después de una década desde su último trabajo (el recopilatorio Music Bank, 1999) y el primer disco de estudio propiamente tal sin Layne Staley en las voces.
“Check My Brain”, es una explosión en tu cerebro desde el primer segundo en la que comienza a sonar, provocada por un riff potente y constante con todos los valores del grunge patentados de la guitarra de Cantrell, de esos que te hacen recordar el azote sónico del álbum Dirt, acompañada de un sonido de platillo constante, abrazado por una ascendente y oscura melodía de bajo y batería, entregadas por Sean Kinney y Mike Inez. Luego de esta densa introducción, llegan las voces a dúo de William Duvall y Jerry Cantrell, unas líneas vocales gruesas que te acompañan por el resto de la obra, que te pide que revises tus pensamientos, que no olvides tus penas, tus caminos, tus raíces musicales. La fuerza para seguir adelante después del brutal luto de la enorme pérdida de uno de tus mejores amigos y ese inmenso vacío que dejó.
Y sí, es porque después de la dolorosa y trágica pérdida de Staley, a estas alturas mítico vocalista de Alice in Chains, surgieron muchos cuestionamientos sobre cuál sería el futuro de la banda y qué trabajos presentarían. Que terminaban al cabo de llegar al final de la década de su partida. El día que llegó este sencillo, algo nos permitía viajar en el tiempo, a la oscuridad, los domingos por la tarde, a las camisas a cuadros, la tristeza de los ’90, que nos llevaba a visitar el sepulcro de Layne, y nos permite volver a dejar flores, velas y penas a sus pies, para recordarlo siempre. Alice in Chains estaba de vuelta y los sentimientos encontrados no podían dejar de ser ser tema de debate y cuestionamientos sobre si esto era de verdad o no.
El tiempo le ha dado la razón al ser Cantrell quien decidía si valía la pena conservar la vida y espíritu de la banda, que ha encontrado camino junto a DuVall y que costó hacer realidad un poco, pero que ha sabido ser apreciado, pese a que el fantasma de Layne ha sido tan fuerte, que es inevitable cuestionar si este es realmente el AIC que queríamos, si era mejor dejarlo sepultado para siempre o si era una nueva vida de la banda digna de su historia. “Check My Brain” ha dejado demostrado que es un tema que preserva esos valores, esos matices, -al menos- y ya con más de una década de crecimiento este temazo se ha ganado el aprecio y respeto de sus fans de vieja y nueva escuela.
Por Diego del Campo