Cancionero Rock: «Everlong» – Foo Fighters (1997)

45 minutos le tomó a Dave Grohl escribir una de las canciones más significativas de su carrera con los Foo Fighters. La melodía y el carácter sombrío del tema tuvieron su razón de ser: en una entrevista a la revista Mojo el cantante declaró que la inspiración para este tema llegó en uno de los peores momentos personales de su vida: luego del divorcio con su novia, la fotógrafa Jenniffer Youngblood, asunto que lo dejó sin casa y teniendo que usar un saco de dormir en el apartamento de un amigo, más aún cuando se quedó sin acceso a su cuenta bancaria y con la banda pasando por difíciles momentos también (en ese período su baterista, William Goldsmith, y el guitarrista Pat Smear, estaban pensando en dejar la banda, y de hecho, más adelante lo hicieron). Tampoco dejar de lado que aún estaba bastante deprimido por la muerte de su amigo y compañero de Nirvana Kurt Cobain, historia que todos conocemos muy bien.

Fue así como nace ‘Everlong’, un temazo lleno de melancolía del queridísimo «The Colour and the Shape» de 1997, tema con el cual acostumbran a cerrar desde hace ya varios años sus shows convirtiéndose en momentos muy emotivos.

El video es bastante extraño a decir verdad, fue uno de los notables videos muy repasados por la cadena MTV en esos años, dirigido por Michel Gondry, con una influencia clara de la película de culto de terror Evil Dead y donde Grohl interpretaba a varios personajes freaks, todos metidos dentro de un sueño, desde un chico punk vieja escuela, a otro nerd campesino y encarnando dentro de ellos a una especie de bizarro superhéroe llamado «Handor», que protegía a la gente convirtiendo su mano en gigante y golpeando a sus enemigos. Fue un personaje que al director francés se le aparecía recurrentemente en sus sueños, de hecho como contara.

También se ha hablado que la nostalgia del desamor en esos días lo llevaron a recordar a su antigua novia, la vocalista de Veruca Salt Louise Post, a quien tilda de loca y desadaptada en la letra y de esa extraña relación que tuvo con ella.

Hay amor, pérdidas, nostalgia, humor en el video y rabia en la canción, quizá los ingredientes precisos para que se haya transformado en una de las más queridas, no sólo por su fanaticada, sino por los propios Fighters y el mismo Dave Grohl, claro está.