Tras la partida del bajista Tom Petersson, todo se le puso cuesta arriba a Cheap…
Cancionero Rock: “Ghost Town” – Cheap Trick (1988)
En 1988, Cheap Trick se enfrentaba con su discográfica tras el fracaso comercial de su álbum anterior, viéndose obligados a contactar compositores externos para intentar dar vuelta el tablero. Quizás, el aporte más sorprendente provino de Diane Warren, aquella de las baladas de Michael Bolton y Celine Dion, y que provocó la ira, otra vez, de los puristas del rock; ellos no podían soportar que estos estandartes del power pop “ayudaran” a posicionar a sus héroes rockeros en las listas, pero los tiempos que corrían obligaban a tomar decisiones incómodas y eso significó incluir a la baladista (nominada 11 veces al Oscar), en la composición de “Ghost Town”.
La canción tenía historia desde 1981, cuando el principal compositor de la banda, Rick Nielsen, inició su redacción sin terminarla, para luego retomarla en las sesiones de “Lap of Luxury”; allí fue cuando Warren agregó algunas contribuciones a la canción para darle ese tono conmovedor que la distingue de tantas.
La melodía de suspiros de Nielsen quedó con todos los altos y bajos adecuados para que Robin Zander diera una interpretación torturada, sonando como un hombre a punto de derrumbarse. Nielsen también aporta su guitarra solista para aumentar la angustia. El tema está en sintonía total con la época, donde las radios se llenaban de power ballads que daban mucha notoriedad a las bandas, en una guerra constante por sobresalir entre el heavy, el pop y el metal. En ese contexto, no había más remedio que repetir fórmulas usadas por otros, sobre todo en una banda antigua y que bregaba por adaptarse a un tiempo de videos musicales y mucho relleno.
A pesar del aura romántica que tiene, con la típica historia de hombre desconsolado y los suspiros bien trabajados del inicio, su ritmo es atemporal y los buenos arreglos de cuerdas le dan un touch rockero, con un riff intermedio que parece inspirado en los mejores trabajos de George Harrison, sin embargo, eso no bastó para que alcanzara altos lugares en las listas; ese quedó reservado para “The Flame”, que encabezó el Billboard, mientras que “Ghost Town» tuvo un rendimiento intermedio, pero igual se mantuvo 14 semanas en los charts y décadas en la lista de las buenas baladas rock de los 80’s, aunque siempre a la sombra de los otros singles del disco.
Como si fuera poco, en la historia pomposa de nuestro Festival de Viña, pudimos escuchar en vivo este tema, en el mejor momento de una banda subestimada y cuya historia setentera ha sido muy poco revisitada. Lamentablemente, “Lap of Luxury” y “Ghost Town” le dieron algo de oxígeno a los de Illinois, pero no el suficiente para prosperar en los 90’s, sin embargo, la interpretación excelente de Zander y el ritmo apaciguado de sus guitarras le han dado vida al pueblo fantasma hasta hoy.