Cancionero Rock: «Money» – Pink Floyd (1973)
El Dark Side of the Moon destaca por ser un álbum onírico, con muchas ideas e inspiración filosófica que pasa a través de extraordinarias canciones. La vida y la muerte, el lunatismo, la locura, y el cuestionamiento humano están expuestos, pero si hay alguna canción que se desmarca un poco de eso tan espiritual fue «Money», que muestra un lado más crítico, social y de lo que el dinero y la industria de la música trae consigo, aquella parte media diabólica, la avaricia. Pink Floyd, en los setenta fue bien enfático en esto, algo bien desarrollado desde la portada en su otro gran disco de la década como «Wish You Were Here» (aquel tipo en llamas estrechando manos con otro), sin embargo, lo paradójico es que estas mismas canciones fueron las que les significaron ventas millonarias en su historia.
«Money» a menudo se malinterpreta como un tributo al dinero. Mucha gente pensó que la línea «El dinero, es un gas», significaba que consideraban el dinero como algo muy bueno, pero es todo lo contrario. Al inicio la línea «Money, get away» lo deja claro, aunque todo se va rellenando con frases de todo lo que se puede comprar con dinero y situaciones de glamour, aunque el detector de ironía para varios no ha andado muy bien que digamos.
Hay bastante técnica en ella. La canción comienza en un inusual 7/8 de tiempo, luego, durante el solo de guitarra, la canción cambia a 4/4, luego regresa a 7/8 y termina en 4/4 nuevamente. Cuando Guitar World, en febrero de 1993, preguntó a Dave Gilmour de dónde venía el famoso sello de «Money», el guitarrista de Pink Floyd respondió: «Es el riff de Roger. Roger llegó con los versos y las letras de «Money» más o menos completos. Acabamos de hacer secciones intermedias, solos de guitarra y todo eso. También inventamos algunos riffs nuevos: creamos una progresión 4/4 para el solo de guitarra e hicimos que el pobre saxofonista tocara en 7/4″.
Roger Waters es el único compositor acreditado en esto, pero la voz principal es de David Gilmour. Fue él quien armó la secuencia de cinta de la clásica caja registradora que se reproduce a lo largo de la canción. También contiene los sonidos de papeles y bolsas de monedas que se arrojaron a un recipiente industrial para mezclar alimentos. La introducción se grabó capturando los sonidos de una vieja caja registradora en cinta, y empalmando y cortando meticulosamente la cinta en un patrón rítmico para hacer el efecto de «loop de caja registradora».
Muchos efectos de estudio fueron utilizados en esta canción y en todo el disco, por cierto. Estaban usando un nuevo grabador de 16 pistas, lo que les permitió colocar los sonidos en capas mucho más fácilmente, pero las técnicas de estudio aún así fueron complejas y les causaron un trabajo arduo en 1973, ya que no había grabadores ni opciones digitales disponibles como los que tenemos hoy.
Fue una canción de todas maneras innovadora y una que, por cierto, destaca por aquella exigida sección de saxo a cargo de Dick Parry y que con el tiempo ha sido interpretada por distintos saxofonistas, y que no deja de ser un momento único en sus shows en vivo.
Por Patricio Avendaño R.