Cancionero Rock: “Pigs (Three Different Ones)” – Pink Floyd (1977)

Cancionero Rock: “Pigs (Three Different Ones)” – Pink Floyd (1977)

Si hay algo que para siempre elogiaremos del gran Roger Waters son las grandes ideas que ha puesto en los álbumes de Pink Floyd, haciendo de estos discos más que discos de música, obras conceptuales, y más que obras conceptuales, obras de arte con temas atemporales, de esas que se quedan conservando su carácter de eternas y que te dejan con ganas de admirarlas una y otra vez, como una gran pintura o un libro de literatura clásica.

En este caso del «Animals» (1977), justamente la literatura tiene mucho que ver, pero la forma que lo expuso Roger Waters marca la diferencia. George Orwell se despachó el libro «Animal Farm» (La Granja de los Animales) en 1945, año clave en la historia y cuando termina la Segunda Guerra Mundial, una fábula con matices claros sociopolíticos y alegorías al comunismo, donde los representantes de la ley eran perros, los cerdos fueron elegidos como dictadores y tiranos gobernantes y las ovejas como peones que siguen al rebaño. El álbum, pese a estar claramente influenciado por el libro, es una crítica directa y más abierta a la sociedad de consumo y cómo somos manejados por éstas.

En el tema «Pigs /Three Different Ones)» como bien su nombre lo dice, en cada uno de los tres versos de la canción muestra a un «tipo de cerdo» diferente, cuya identidad sigue siendo especulativa, aunque con el correr de los años se han desvelado algunos personajes reales en torno a sus identidades. Por ejemplo, el tercer versículo identifica claramente a su sujeto como Mary Whitehouse, una mujer británica que dirigió un movimiento para mantener el sexo en censura y fuera de la televisión, algo que es descrito como un «orgulloso ratón de casa de ciudad» que tiene que «mantener nuestros sentimientos alejados de la calle».

Big man, pig man, ha ha, charade you are, oh
Hombre grande, hombre cerdo, ja ja, eres una farsa, oh,
You well heeled big wheel, ha ha, charade you are
tú, pez gordo gordo ricachón, ja ja, eres una farsa.
And when your hand is on your heart
Y te pones la mano en el corazón,
You’re nearly a good laugh
eres casi un buen chiste,
Almost a joker
casi un bromista,
With your head down in the pig bin
con tu cabeza metida en el comedero de los cerdos,
.

Bus stop rat bag, ha ha, charade you are
Vieja rata de parada de autobús, ja ja, eres una farsa.
You fucked up old hag, ha ha, charade you are
Tú, jodida vieja bruja, ja ja, eres una farsa.
You radiate cold shafts of broken glass
Irradias fríos radios de cristal roto

Hey you Whitehouse, ha ha, charade you are
Oye tú, Whitehouse, ja ja, eres una farsa;
You house proud town mouse, ha ha, charade you are
tú, orgulloso ratón de casa de ciudad, ja ja, eres una farsa.
You’re trying to keep our feelings off the street
Intentas mantener nuestros sentimientos alejados de la calle,
You’re nearly a real treat
eres casi un auténtico deleite.
All tight lips and cold feet
Todos labios herméticos y pies fríos…
And do you feel abused?
¿Y te sientes insultado?

Al parecer, el primer verso representa a un hombre de negocios estafador, el hipócrita y corrupto autoproclamado superior que siente que puede engañar y persuadir con tal de llegar a la cima del éxito, mientras que el segundo verso podría referirse a la figura política de Margaret Thatcher, que era en ese momento (1975) un miembro principal del partido conservador de Inglaterra, pero que llegó al poder como primer ministro de Gran Bretaña derrocando al laborista que estuvo largas décadas en el gobierno. El régimen Thatcheriano fue conocido por ser ultraconservador y enarbolado de “los valores victorianos”.

La historia real contada en su biografía habla de este cerdo de la portada del álbum, un gigantesco cerdo inflable que flota sobre una central eléctrica de Londres. Durante el rodaje, el cerdo se lanzó al aire, causando caos y fue perseguido por la policía mientras flotaba cerca del aeropuerto de Heathrow. Subió unos 18.000 pies antes de bajar en una granja en Kent. «Algie» como se le llamó se ha convertido en ícono de la imaginería de los conciertos de Pink Floyd, donde hasta las disputas por los derechos han estado involucradas. ¿Será que este cerdo avaro del primer verso se volvió en contra de ellos mismos?

Acá la gran canción, grandiosos teclados Hammond de Rick Wright, líneas de bajo clásicas proporcionadas en este tema-curiosamente- por David Gilmour y una monstruosa guitarra y solos, acompañada de esta atmósfera porcina, por supuesto. Parte del magistral «Animals»:

Patricio Avendaño

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