Una que no pertenece a la primera línea de éxitos, quedando relegada algo más atrás;…
Cancionero Rock: “Rock ‘N’ Roll All Nite” – Kiss (1975)
El mayor himno de la institución que es Kiss, eso viene a significar Rock ‘N’ Roll All Nite para la agrupación neoyorkina. Un cierre de oro y circense lleno de confeti en sus conciertos, posición inamovible que tiene desde hace casi medio siglo; excepto por contadísimas situaciones. Porque es sencilla, pegajosa y directa: “quiero rock ‘n’ roll toda la noche, y fiesta todos los días” —y cercana a terminar, es habitual ver a Paul Stanley rompiendo su guitarra contra el suelo, algunas veces hasta prendiéndole fuego.
Pero no siempre tuvo aquellas grandes dimensiones. Encomendada para cerrar el tercer álbum, Dressed to Kill (1975), ni siquiera alcanzó a cronometrar tres minutos de duración. Frágil y austera, tal como era Kiss por ese entonces en los estudios de grabación, ni siquiera tenía un solo de guitarra hacia el final —añadiéndosele en los shows en directo, ganando así un minuto extra. Compuesta a partir de una maqueta llamada Drive Me Wild, su paso fue inadvertido; pese a haber sido single promocional, teniendo inclusive un primigenio videoclip.
Lo que hizo estallar la canción, quitándole su sonido garage con leve inclinación a lo Chuck Berry, fue la aparición de la placa Alive! (1975). En una época donde los trabajos en vivo no eran comunes, y siendo esta la última carta de supervivencia para banda y del propio sello discográfico, fue aquel corte de Rock ‘N’ Roll All Nite lo que sacó la labor adelante hasta volverlos superestrellas —sin ser de extrañar que esa sea la versión de la mayoría de los futuros compilados, además de asomar por algunos segundos en la introducción de Detroit Rock City (1976).
Porque el verdadero fuerte de Kiss, durante los primeros años en que todavía no despegaban, era su potencia sobre el escenario; un secreto a voces que hacía agotar las entradas, a lo que le terminaron sacando partido y Rock ‘N’ Roll All Nite fue la mejor beneficiada —junto con todos nosotros, claro.