Cancionero Rock: «Where Is My Mind?» – Pixies (1988)
El maravilloso abanico de buenas canciones y melodías que nos ha ofrecido Pixies en su historia es notable. Y lo siguen haciendo sin perder su esencia con el regreso que ha tenido la banda a la palestra musical con un par de discos en esta última etapa, pero no cabe duda que donde más lograron conquistar corazones y volar cabezas, con esa receta simple, agresiva y directa, es con la parte de su catálogo dejada a fines de los ochenta.
«Where Is My Mind?» es un clásico que no expira, reapareciendo como boomerang una y otra vez en bellos pasajes de nuestras vidas y siendo parte de algunas notables bandas sonoras como para recordárnoslo aún más. La canción, que como todo en los Pixies queda muy abierta al sin sentido y a las disímiles interpretaciones, no deja de calarnos fuerte en el cerebro y corazón con sus estrofas y ritmos, porque quizá, es una de las más adorables y emocionantes melodías que hayamos podido escuchar en una canción de rock alternativo.
Frank Black dijo que se trataba de bucear en el Caribe, de tratar de meterse dentro de la cabeza de un pez y descifrar que es lo que piensan ellos, pero también cuenta con un aura tan mágica que es imposible no pensar que está puesta en el tono de «donde está nuestra propia mente?» en determinados momentos de nuestra vida, para nosotros los humanos también.
Frank Black (Select, octubre de 1997): «Eso vino de mí buceando en el Caribe y teniendo a este pequeño pez tratando de perseguirme. No sé por qué, no sé demasiado sobre el comportamiento de los peces», dijo en esa oportunidad.
Quien no lo pensó así tan literal y de alguna manera «descubrió» lo que hay detrás de ella seguramente fue David Fincher al ponerla en la escena final de su gran película El club de la pelea, ya que es probablemente uno de los momentos más perfectos en la historia del cine, sin duda encajando al filo del concepto con esa forma de estrujar nuestros sesos con los vuelcos sobre la realidad y la sicología humana de tan magno film, brillando como una metáfora perfecta sobre lo que es perder tu vida al adoptar un estilo de vivirla por el consumismo y metas vacías, como un océano de cosas inútiles. El pequeño pez, la gente que realmente no conoces ni se preocupa de ti, la verdadera metáfora, que es absolutamente asombrosa, es el hecho de que esta canción hace eso, darte un vuelco. En la canción el icónico personaje de Tyler Durden está loco, perdido, confundido, al mismo tiempo, diciéndote que necesitas un cambio si no te gusta la vida como lo es ahora. Cuando se cree que todo es exactamente lo contrario, que tu vida es perfecta. La elección de la canción para el momento de la película, en ningún caso fue coincidencia.
Hay cosas en su estructura, los sonidos, como entra la batería desde lejos y luego tan potente. El productor Steve Albini usó algunas técnicas de grabación inusuales en Surfer Rosa porque estaba desesperado por evitar «el sonido del estudio». Por ejemplo, movió todos los equipos a su baño con la esperanza de lograr un eco real en lugar de un sonido «de estudio» en la voz de fondo de la bajista Kim Deal, para este y su voz principal en otro gran tema del disco como lo es Gigantic. Albini luego admitió que el registro podría haberse completado en una semana si no fuera por el tiempo perdido experimentando en proyectos como este. Vaya que valió la pena.
Por Patricio Avendaño R.