Clutch y su deuda saldada con Latinoamérica
Ayer concluyó con éxito la primera gira latinoamericana de Clutch, cabe recordar que la banda estadounidense sólo había visitado Brasil en 2014. Durante fechas exitosas en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México, los nativos de Germantown, Maryland, demostraron porque son una de las agrupaciones más queridas de lo que muchos han denominado “stoner rock”, con claras influencias de Black Sabbath, pero que en su caso también hay una enorme influencia de blues y de clásicos de rock de las décadas de los 60’s y 70’s.
Si bien es cierto que su set fue de 18 canciones en cada fecha y con un esqueleto que trataba de recoger piezas de toda su discografía, en cada fecha hubo sorpresas y ajustes que hicieron el deleite de los asistentes, incluso en el caso de Argentina, la banda tocó un clásico de Pappo’s Blues, “Algo Ha Cambiado”, un cover que Clutch había incluido en su serie de covers «The Weathermaker Vault Series, Vol.I» de 2020. En el caso de Chile, tocaron “El Jefe Speaks”, un corte de su disco debut que durante años había sido abandonado.
En el caso mexicano cabe recordar que Clutch tenía pactada una presentación en el festival Domination en su edición de 2020 y que desafortunadamente fue cancelado por la pandemia provocada por el covid, cuando nadie tenía certeza acerca de si volveríamos a tener una escena musical que permitiera la asistencia a eventos masivos.
Nación Rock estuvo presente en el Foro 28 de la Ciudad de México y fue testigo de una demostración clara de cómo el grupo ha sabido crear su propio nicho, una banda querida por metaleros, amantes blues, rockeros de viejas y nuevas guardias con un muy peculiar estilo lírico y de entrega vocal de Neil Fallon. “The Mob Goes Wild” inició la noche, un arranque espectacular y que sorprendió al público que lastimosamente tiende a llegar tarde a los conciertos. Otros grandes momentos de la noche fueron “A Quick Death in Texas” con su groove total y la combinación especial de “X-Ray Visions” junto “Firebirds”, todas canciones del excelente «Psychic Warfare».
El cierre de la noche fue con su ya clásico “Electric Worry”, un blues rock que ZZ Top estaría orgulloso de haber escrito, un recordatorio de que la vida aunque sea a veces dura, siempre será vida, no hay nada más allá y lo resumen perfectamente con las siguientes líneas:
You can have your riches, all the gold you saved
Ain’t room for one thing in everybody’s grave
La última canción de la noche fue el excelente cover de “Fortunate Son” de Creedence Clearwater Revival, una canción que desde su origen ha sido de protesta, un himno antibélico y un eterno recordatorio de que el arranque de la vida no es pareja, aunque algunos políticos y empresarios siempre digan que todos tenemos las mismas oportunidades.