Aún con el duelo sobre sus hombros tras la triste partida de Andy Fletcher el…
Depeche Mode-Memento Mori (2023): Recuerda que morirás
Sony Music/Columbia, Mute Records
Un nuevo disco de Depeche Mode es algo que no deja indiferente a nadie que guste de la banda, la música electrónica y los sintetizadores. Esta vez, el anuncio que llegó en 2022 venía con un nuevo significado: sería el primer álbum de la banda sin uno de sus miembros fundadores, Andrew Fletcher, quien falleció debido a causas naturales ese mismo año. Desde la partida de Alan Wilder luego de la era “Songs of Faith and Devotion” que la banda no experimentaba un cambio radical en su formación, y sumado a la evolución que tuvo el proyecto como trío, la expectación por escuchar lo que Martin Gore y Dave Gahan entregarían no era menor.
Como era de esperarse, “Memento Mori” se presenta con un mood híbrido que varía entre composiciones calmas/oscuras y otras más positivas, además de una predominancia notoria de los sintetizadores. El disco comenzó su proceso de composición en 2020 (y que, de hecho, obtuvo su título ya en aquél entonces, por el impacto de la pandemia), cuando Fletcher aún estaba vivo. Sin embargo, la banda decidió continuar con el proyecto a pesar de su deceso.
“My Cosmos Is Mine” abre el disco con beats y bajos profundos, a los que se suma la voz de Gahan que, más que cantar, parece recitar un mantra con una letra que no varía mucho en su contenido, mezclándose con distintos sintetizadores que se van abriendo espacio a lo largo de la canción y se funden al unísono. “Waggin Tongue” recuerda un poco a la vuelta que tuvo la banda con “Playing the Angel” en 2005, con una estructura más pop y electrónica, pero que no termina por explotar.
“Ghosts Again” fue el primer single del álbum y no es de extrañarse por el contenido de su letra (“Heaven’s dreaming. Thoughtless thoughts, my friends. We know we’ll be ghosts again”). La voz de Gahan suena con más actitud y aparece también una de las pocas guitarras notorias del disco, pero con una melodía que bordea lo meloso. Aún así, escuchar las armonías vocales de Gore siempre es disfrutable.
“Don’t Say You Love Me” y “My Favourite Stranger” funcionan muy bien en el tracklist del álbum, logrando un contraste que va de la mesura y sensualidad característica de la banda, a una pista de mayor velocidad donde los arreglos de cuerda mantienen la atención despierta. “Soul With Me” tiene a la voz de Gore como principal, en un track electrónico que de seguro servirá para darle descanso a Gahan en las presentaciones en vivo.
“Caroline’s Monkey”, “Before We Drown” y “People Are Good” son, quizás, los puntos más altos del disco, en donde las incursiones electrónicas toman un vuelco más protagónico en las líneas melódicas de las canciones, siendo relevantes al mismo nivel que las voces o percusiones. Gahan se percibe más como un espectador que como un elemento protagónico (si comparamos la actualidad con lo que fue Depeche Mode alguna vez), pero esto habla muy bien de la maduración y cohesión que ha obtenido el proyecto con el paso del tiempo.
“Always You” se siente nostálgica y reiterativa, mientras que “Never Let Me Go” acelera un poco las cosas en el lapso final del álbum, donde Gore y Gahan hacen buen uso de sus voces sonando a la par. “Speak To Me” suena sombría, con una mezcla de sintetizadores bajos que generan una tensión muy atractiva y que, casi al final de la canción, se transforman en un beat que cierra el disco de forma elegante.
Es preciso decir que “Memento Mori” está lejos de ser el mejor disco de la banda (y lejos también de trabajos más recientes que se sintieron como un renacimiento para el sonido de la banda, como “Sounds of the Universe” o “Delta Machine”), pero quizás Gore y Gahan no buscaban llegar a eso en lo absoluto. Sí es una muestra fiel de un grupo que, incluso en su álbum n°15 no deja de mostrar clase y precisión en su trabajo. Más importante aún, no deja de ser un correcto tributo a Fletcher, quien estuvo a cargo de las teclas principales en Depeche Mode desde su inicio.