Disco Inmortal: Pearl Jam – Riot Act (2002)
Epic Records, 2002
¿Hacia dónde iba Pearl Jam a inicios del milenio? Luego de ese extraño producto llamado “Binaural” podríamos definir al «Riot Act» como una alabanza a la colaboración extrema. En cada tema se reencausa una fuerza creativa que estaba algo extraviada en Eddie Vedder, y que en esta ocasión decidió trabajar de mejor forma en la interna de la banda: que nadie se sintiera excluido, que nadie fuera obligado a seguir una línea determinada en el proceso creativo.
Es así como “Can’t Keep” tiene tintes psicodélicos, “Get Right” le da preferencia al guitarreo, la melodía rockera de “Green Disease” o el cierre mixto de “All or None” nos sorprenden gratamente. Hay más dinamismo, acústica, presencia de órganos….de todo encontramos en este disco del 2002 de una de las bandas que se adueñó de la escena a mediados de los 90, pero que llegando al final de esa década perdió su sentido en el universo y trajo dos productos que ni sus fans entendieron mucho.
Con Adam Kasper en la producción, el álbum termina siendo una recolección de creatividad; hay canciones que no son reconocibles con alguna anterior de la banda, hay acordes que no logramos identificar con alguna propuesta de algún disco anterior. Acá se la jugaron por navegar a otros espacios, por imaginar otros escenarios acústicos, de rasgueos. “You Are” es un tema magistral y uno de los mejores del disco; es un monstruo afilado en guitarras durísimas, protagonistas, que ayudan a la batería a llevar un ritmo descarnado; tema de sonido extraño porque coquetea con el funk pero que tiene riffs impresionantes. Eddie recupera su mejor voz, su calidad interpretativa es sobresaliente, el tema te envuelve y no te deja escapar. En “Help Help”, tema detestado por la crítica pero obra de Jeff Ament, se pasa de la velocidad a un dulce estribillo, mostrando un fondo instrumental super intenso, no tan de Pearl Jam, es algo novedoso y que muestra otra línea creativa.
Escuchando las letras, el álbum está marcado por la tragedia. El año 2000 habían muerto 9 fans en un concierto en Dinamarca, mientras que en 2001 fue el atentado a las torres gemelas. La banda tenía algo que decir, debía emitir su opinión, no podía quedar impávida ante lo que ocurría, y es por eso que la avalancha de letras viajó de la cabeza al papel con facilidad, pero también con dolor pues había material, había atmósfera para caracterizar el disco de esa forma. Y quizás el tema que mejor resume ese viaje es “I Am Mine”, con una letra poderosa, un gancho fuerte y una hermosa melodía; sí, quizás es la típica canción de Pearl Jam “hecha para la radio”, pero el tema es una afirmación positiva de que puedes decidir qué hacer más allá de sólo nacer y morir. “Save You” es convencional pero poderosa; “Love Boat Captain” es sumamente intensa y cambia de ritmos de manera interesante, mientras que “Ghost”, una de mis predilectas, se circunscribe totalmente al ideario Pearl Jam más extremo, qué buen tema!!
La balada “Thumbing My Way” es otro knock out, otro de los ganchos de este disco. Pensada de una forma en los ensayos y capturada, tal cual, de uno de ellos por el productor. Por eso suena tan crítica, por eso su rasgueo nos parece tan descarnado, y es así como resuena el disco también.
“Riot Act” claramente no es “No Code” pero es algo más sostenible que “Binaural”. La pregunta qué queríamos contestar ese 2002 era hacia donde iba Pearl Jam. “Riot Act” nos muestra menos dudas a la hora de encontrar la respuesta: las letras potentes, la potencia instrumental y una producción de lujo. Aunque también es un disco con baches, como los medios tiempos, que no están bien trabajados, y en algunos temas, como “Help Help”, que parecen haber sido creados para satisfacer a las emisoras y al mainstream del que tanto se rodea la banda. Es uno de los discos que menos ventas ha tenido en la historia de esta legendaria agrupación, pero es digno de recordar pues escuchamos a un Stone Gossard más maduro y a un Jeff Ament muy solvente.