Disco Inmortal: Scorpions – Lovedrive (1979)
Harvest Records / Mercury Records, 1979
Morían los ’70 y con ellos una gran etapa dentro de la historia de esta extraordinaria banda germana. En 1978, Scorpions lanzó el infravalorado «Tokio Tapes», que sería la última placa con el mil veces virtuoso Uli Roth. Y luego vendría «Lovedrive», un completo clásico en la discografía del grupo y que contó con la participación de Michael Schenker, otra insignia brillante dentro de toda la historia del hard rock ochentero. «Lovedrive» se lanzó en 1979 convirtiéndose en un suceso mundial y abriéndole, a los alemanes, las puertas en Estados Unidos, donde vendieron 500.000 copias.
Todo parte con «Loving You Sunday Morning», una agradable combinación de ritmos pesados que dejan entrever, tímidamente, los acordes de la guitarra de Jabs por primera vez. «Another Piece of Meat» es más dura y nos da una contundente muestra de riffs, junto a una combinación perfecta de sonido. La voz de Klauss en su mejor momento, exigiéndose sin esfuerzo y armonizando en esa gran balada que es «Always Somewhere». ¿Es la mejor balada de Scorpions? Por calidez y sentimiento se impone aunque, en lo personal, «Still Loving You» es de otro mundo. «Coast to Coast» no tiene descripción: es un himno, inmortal, que grafica en cada acorde lo que es el rock. Precisión, perfecto acople, composición estructurada adecuadamente, logrando el lucimiento de cada integrante y dejando claro la madurez musical que habían alcanzado. Nuevamente tenemos desenfreno con «Can’t Get Enough», tema lleno de apoteósicas guitarras, riffs precisos, macizos, que nos invitan a disfrutarlo todo. Gran tema. Pero luego caemos en algo, quizás, experimental. ¿Qué es «Is There Anybody There?»? , una propuesta de la mano del reggae, muy bien hecha en todo caso, y por eso no desentona junto a las guitarras poderosas y los solos que se acoplan en esta composición.
«Lovedrive» es el puente que separa el pasado y el futuro de los alemanes, con un bajo grandioso de Buchholz, que da el soporte a otra gran obra que adorna, de manera brillante, la discografía. El álbum cierra con «Holiday», otra increíble balada de comienzo acústico, llena de sentimiento en todo lo largo, pasando de un tiempo lento a uno más crudo, haciendo del tema un cierre muy dinámico.
La dupla Shenker/Meine se inspiró en este álbum que terminó siendo una total influencia en el hard rock, abriendo un nuevo camino, dando un paso adelante tanto en concepto musical como en estética. Se nota otra forma de componer., menos compleja pero que encuentra la misma perfección de riffs en comparación a placas anteriores. A pesar que «Lovedrive» es un recomienzo, una nueva etapa, la identidad de la banda madura a través de la voz inclaudicable de Meine y el virtuosismo gigante de las guitarras. Y este primer paso se afianzó con sus discos posteriores, sobre todo «Blackout» y «Love at First Sting», verdaderos golpes a la cátedra, discazos de gran factura, que terminaron por cimentar los pilares de una banda que, hasta hoy, gira por el mundo con los ases de «Lovedrive» bajo la manga.
