Disco Inmortal: The Beatles – Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band (1967)
Parlophone, 1967
Es el octavo álbum de estudio de los Beatles y uno de los más importantes de la historia de la música popular sin duda, de forma muy transversal a los estilos. Publicado en Inglaterra el 01 de junio de 1967, la idea para crear este álbum comenzó con un evento fortuito en la vida de Paul McCartney, en sus vacaciones en Francia de 1996. Para poder ir a la playa y a los sitios turísticos sin que una turba de fanáticos se le acercara, Paul tuvo que estar todo el tiempo disfrazado para pasar de incógnito, usando bigotes falos, sombreros y gafas. Sus vacaciones fueron todo un éxito: por algunos días pudo recordar qué era lo que se sentía ser una persona común, una más entre la multitud. –¿Y qué pasaría si los Beatles también se disfrazaran?- se preguntó-, ¿Qué ocurriría si entre todos interpretaban una especie de performance que no solo alterara su imagen sino también su música? Pensando en esta idea Paul escribió la canción que le da nombre al álbum, esa obertura en la que se presenta a la banda del Sargento Pimienta. Al comienzo la canción no tuvo mayor trascendencia dentro de la banda, hasta que un día le dijo a John, George y Ringo: “¿Qué tal si hacemos todo el álbum como si en realidad existiera la banda del Sargento? ¿Qué pasaría si usamos trajes extraños, extravagantes y de colores? ¿Y qué tal si ponemos todo lo que se nos ocurra en las canciones?
A la banda, al productor George Martin y al mánager Brian Epstein les pareció fascinante la idea de hacer que los Beatles no tuvieran que ser los Beatles por un tiempo, de componer y grabar un álbum que no necesariamente tuviera que sonar como a las producciones pasadas. El Sargent Pepper se convertía así en una excusa para la exploración, para el desarrollo de una libertad creativa sin límites palpables a través de la personalización de una nueva banda, circense, iridiscente, estrafalaria. Las nuevas canciones que comenzaron a surgir precisamente a través de la exploración infinita –incluyendo sonidos ambiente y teatrales, posibilitando la exploración de un realismo narrativo en las letras de Paul y de una casi que aleatoria y psicodélica elección de palabras en las letras de John–, tenían como propósito recuperar algo que los Beatles estaban perdiendo por ese momento de su historia: la posibilidad de divertirse y de pasarla bien haciendo música.
La primera canción del álbum es como la presentación de la banda: “Esperamos que disfrutes del show”. Luego aparece una canción que John y Paul escribieron para Ringo: “With a Little Help From My Friends”. Fue una de las últimas compuestas para el álbum, pues sabían que hacía falta una canción para cantar todos en coro, algo más infantil –de hecho, siempre que escribían canciones para Ringo el primer factor que orientaba la composición era la inocencia y candidez en las letras-. El comienzo de cada verso es una pregunta de complicidad e ingenuidad: -“¿Qué harías si cantara desafinado?” “¿Creerías en el amor a primera vista?-. Luego suena “Lucy in the Sky With Diamonds”, comúnmente asociada al resultado febril y delirante de un viaje de John con el LSD. Sin embargo, la inspiración para esta extraña canción viene de dos fuentes distintas: un dibujo de Julian Lennon —el hijo de John de cuatro años—, sobre su amiga Lucy, que él mismo tituló “Lucy en el cielo con diamantes”. La otra fuente de inspiración era el relato lleno de paisajes estrambóticos y juegos de palabras de Lewis Carroll en “A Través del Espejo”. La cuarta canción del álbum: “Is Getting Better”, refleja la forma en la cual John y Paul podían escribir una letra combinando dos percepciones casi que antagónicas: en los versos se nota la rebeldía de John, sus días difíciles en la escuela; y en los coros la esperanza y el júbilo de Paul cuando canta: “Debo admitir que todo está mejorando, todo el tiempo”.
“Fixing a Hole” utiliza una metáfora del bricolaje, del proceso de tapar con cemento las grietas en una construcción, comparándolo con aquellos momentos en los cuales es preciso sanar las heridas del alma para seguir adelante. “She’s Leaving Home” representa uno de esos pocos casos en los cuales los Beatles tomaban casi que de manera periodística lo que estaba ocurriendo en la sociedad para crear una canción. A lo largo de la segunda mitad de los 60 era bastante común que los adolescentes huyeran de sus hogares, motivados principalmente por las ideas del Flower Power, pero sobre todo en busca de un sueño de libertad restringido por sus padres. La canción cuenta una de esas ocasiones, ambientada por una guitarra acústica y una sección de vientos y de cuerdas, en la cuales una joven de 17 años se despierta a las cinco de la mañana, cierra silenciosamente la puerta de su cuarto, baja a la cocina, agarra su pañuelo, sale a la calle y, finalmente, es libre. “Being for the Benefit of Mr. Kite” es una historia inspirada por un cartel que anunciaba un espectáculo circense con la siguiente inscripción: “La producción de esta noche será la más espléndida realizada en la ciudad”.
“Whitin You Whitout You” se basa en las influencias culturales y místicas de George Harrison, Desde una perspectiva filosófica, entre tambores y el influjo hipnótico del sitar, explica cómo el individualismo solo es una idea producto de la falta de armonía entre los hombres. “When I’m Sixty Four” fue una canción compuesta por Paul cuando tenía 5 años. Cuenta la historia de un hombre que se pregunta si aún lo amarán incluso cuando comience a perder el pelo y a envejecer. “Lovely Rita” es una canción también escrita por Paul sobre una mujer que trabajaba como inspectora de aparcamiento —lo cual era inusual en los 60—. “Good Morning, Good Morning” es una confesión de John sobre lo monótona que se estaba convirtiendo su vida debido al abuso de las drogas: no tener nada que hacer —o mejor, no tener la voluntad para hacer nada—, más allá de ver la tele, estas acostado en sillón de la sala y experimentar que nada en la vida puede generar una emoción significativa. Una temática similar sería tratada en “A Day in the Life”, la canción que cierra el álbum, con un magnífico arreglo de piano, y la voz sumamente sensible e inspirada de Jhon cantando sobre la noticia de un hombre que se voló su propia cabeza en un carro. En la segunda y tercera estrofa se incluye una canción inacabada de Paul, en la que recuerda su rutina normal en un día de escuela, para volver finalmente a la misma melodía del comienzo y a la voz melancólica de John reflexionando sobre las noticias en el diario de Londres.
En cada canción hay una evidente necesidad de impulsar las habilidades creativas, de hacer cosas nuevas y de liberarse de la carga tan pesada que significaba ser un Beatle a mediados de los 60, los cuales fueron los factores determinantes en la creación de este álbum. Además, Sargent Pepper refleja un momento crucial de la banda en el cual se rinde a las nuevas oportunidades de inspiración que se abrían paso a través de las drogas. Cada canción puede o no puede estar influenciada por el ácido, pero la realidad es que para 1967 lo más común eran que John y Paul pusieran los pequeños cartones húmedos en sus lenguas antes de tomar las guitarras, el lápiz y el papel. Incluso Paul, que se había mostrado reacio a este tipo de drogas, comenzó a consumir LSD casi que diariamente. La droga jugó papel determinante no solo en la creación de canciones que hablan de cielos de diamantes, de flores de celofán verde y amarillo, taxis hechos de periódicos, árboles de mandarina, cielos de mermelada, actos mágicos en un trampolín y cabezas de cerdo de fuego real, sino también en la posibilidad de crear un buen ambiente de trabajo entre los cuatro, el cual se nublaba en medio de una presión constante por parte de la prensa y los fans, y también debido a la obnubilación generada por el hecho de brillar demasiado fuerte ante la adoración del mundo entero.
Así, con esa inevitable necesidad que tienen todos los seres humanos en algún momento de sus vidas de convertirse en alguien más, de abandonar por un periodo de tiempo su sentido individual y desplegarse de manera confusa y libre a través de la representación, los Beatles se llenaron de nuevas ideas que por unos meses los unieron como nunca, con una capacidad casi que irrefrenable de creación y con el LSD como los remaches y tornillos que unían y articulaban en confusas formas todo este complejo andamiaje. El cuarteto de pop más famoso de la época creaba un álbum mágico, teatral, con un ambiente psicodélico y una estética elaborada a través de los cómicos y arrebatados significados de una pantomima.
Por Alberto Aldana