Disco Inmortal: The Smiths – The Queen Is Dead (1986)
Rough Trade Records, 1986
Problemas legales y mucha parafernalia adornaron la tercera placa de estudio de los The Smiths, que contó con un provocador título: “The Queen Is Dead”. La banda liderada por Johnny Marr y Steven Patrick Morrissey, no perdía el tiempo en pensar sobre el futuro que le deparaba a los oriundos de Manchester, pues algo presagiaba que no les quedaba mucho en la escena indie de aquellos años.
El conjunto, que ya comenzaba a enfrentar más seriamente los constantes conflictos entre Marr y Morrissey, no escatimó en seguir adelante a pesar de las dificultades y creó una obra maestra en 1985 para el universo del rock y la música. Sin embargo, como fue la constante, por inconvenientes legales, la obra no pudo salir a la venta ese año y solo vio la luz en junio de 1986. Con un sonido hilarante y desafiante, The Smiths afrontó al mundo con un disco que fue producido por sus dos grandes estrellas, que son la esencia del producto final, pues ambos son los creadores de cada una de las canciones.
Con la altivez que siempre los definió, el larga duración de los ingleses, parte con el tema que dio origen al nombre y que contiene un ataque más que incendiario a través de las guitarras de Marr y la lengua lacerante de su vocalista, a la familia real británica y con la cual la masa pensante del rock que imperaba en Inglaterra no sentaba mucha simpatía y mucho menos respeto alguno.
“How I’m the 18th pale descendant / Of some old queen or other”.
‘Frankly, Mr Shankly’, domina una melodía bastante agradable y pegadiza, y que muestra mucho junto a ‘I Know It’s Over’ de lo que la banda fue en todo su recorrido artístico: ser prolíficos. Con ‘Big Mouth Strikes Again’, nos introducimos en el clímax del disco, ya que hace referencia minuciosamente a la legendaria Juana de Arco, pero con la sutileza que le podía dar Morrissey a una canción que lo refleja muy bien. Esta pieza, fue el primer single del disco y además cerró el único trabajo en vivo que ostenta la banda llamado «Rank», que llegó a posicionarse en el segundo lugar de los charts británicos.
«And now I know how Joan of Arc felt / now I know how Joan of Arc felt / as the flames rose to her Roman nose / and her Walkman started to melt».
‘The Boy With the Thorn in His Side’, fue lanzado como anticipo de la placa en agosto de 1985 y exhibe una alegre fotografía del periodista y escritor Truman Capote, captada en 1949 por la renombrada fotógrafa Cecil Beaton. Incluso, la canción fue tan bien recibida por la crítica especializada, que los llevó a tocar esta versión en el famoso programa de música Tops of the Pops en octubre del ’85, meses antes de la publicación de la placa.
‘There Is a Light That Never Goes Out’ es mundialmente reconocida por muchas versiones. Sin embargo, a pesar de la gran popularidad que obtuvo la canción, no fue lanzada como single del disco y tuvieron que pasar largos años hasta que en 1992 voló con alas propias debido a que la producción decidió comercializarla como sencillo del disco. Demás está la historia de la escena de la película 500 Days of Summer de Marc Webb del 2009, donde el protagonista Joseph Gordon-Levitt y Zooey Deschanel comienzan una aventura tragicómica gracias a esta composición.
«And if a double- decker bus / Crashes into us / To die by your side/ Is such a heavenly way to die».
Dejando de lado la comercialización del sencillo, en ella podemos apreciar una narración bastante peculiar de Morrissey y que exclama lo sublime de la banda en cuanto a la creatividad tanto musical como de letras. La penúltima pieza del LP tiene una armonía perfecta entre Morrissey y Marr, haciendo que el oyente ni siquiera recuerde los roces que los llevaron a dar término a una de las mejores bandas de rock del mundo y que incluso, para muchos, fue la que salvó a los años ochenta de la decadencia musical.
Por Bastián Cifuentes A.