Duran Duran en Lollapalooza Chile 2017: Orgulloso pasado, feliz presente

Duran Duran en Lollapalooza Chile 2017: Orgulloso pasado, feliz presente

El éxito total de esta versión de Lollapalooza se cimentó en 3 pilares sólidos: número top metal (Metallica), número top pop con quien está llevando la batuta en la actualidad (The Weeknd) y número top ochentero. De esta última categoría se adueñaron los ingleses de Duran Duran quienes, tal como Metallica pero en su estilo, dieron fundación a un movimiento que trascendió el paso del tiempo, pero que igualmente debía rendir un examen ante un público tan mixto como el de Lolla. ¿La experiencia? verdaderamente fascinante. Desde la puesta en escena y apoyándose en sus grandes ejecuciones, la banda sonó muy ajustada y en estado de gracia.

Duran Duran eran de los más longevos del lineup internacional, sin embargo, y como si recién comenzaran su carrera, no tuvieron problema con salir a escena a las 5 de la tarde, pese a lo extraño que esto pudiera resultar tratándose de una agrupación de tamaña trayectoria; pero los años les han dado inteligencia y lo que presentaron en el escenario fue un show perfecto para un festival: melodías irresistibles, un hit tras otro, sin respiro. Perfectamente podrían haber dado un show de 2 horas y más, sin aburrir, porque son maestros en el arte de entretener.

«Wild Boys» abrió el setlist de manera poderosa, y marcaría el inicio del show sostenido en su primera época; le siguieron la bailable «Hungry Like the Wolf» y la rítmica «A View to a Kill», la recordada canción de la película de James Bond. Acto seguido, arremeten con «Last Night in the City», tema de su más reciente álbum «Paper Gods» y que parece haber sido compuesto para un show en vivo, pues tiene un equilibrio de pop, rock y de electrónica que hizo saltar al público. La ovación vino con “Come Undone” y un suave coqueteo con su corista Los climas fueron manejados de manera brillante y hubo lugar para bajar decibeles. Otro clásico que no resiste años: “Notorius”. Ritmo, sensualidad, energía, nostalgia. Un gran tema de su repertorio. «Pressure Off» le siguió, para luego pasar a un homenaje a David Bowie, el que se coló durante la performance de «Planet Earth». «Space Oddity» se entrelazó con el tema de 1980 y una foto del fallecido artista fue todo lo que se vio en las pantallas durante unos minutos. No habría Duran Duran sin David Bowie.

La clásica «Ordinary World», del disco de 1993 “The Wedding Album», fue coreada en pleno y lo que vino después fue la evidencia exacta de qué es Duran Duran: «I Don’t Want Your Love», del injustamente infravalorado «Big Thing», sorpendió a todos por la fuerza que aún posee ese coro. A la vez que «White Lines» (cover de Grandmaster & Melle Mel que el grupo incluyera en su disco «Thank You») atrapó con sus distorsiones de guitarra y energía. «(Reach Up for the) Sunrise», un tema de 2004 y que puso a la banda en onda de creatividad melódica, fue una de las más aplaudidas, junto con la genialidad de incluir el estribillo acelerado de la histriónica «New Moon on Monday». Ya todo era festejo, la fiesta estaba desatada y qué mejor que coronarla con un símbolo: «Girls on Film».

El bis tenía que ser con dos temas sello Duran Duran. «Save a Prayer» cautivó al público por completo; una canción que no envejece, que no suena añeja y que nadie puede evitar corear a gritos. El final llegó con «Rio» y el desborde de nostalgia que se viene encima apenas suenan los acordes.

Musicalmente, el show se basó en sonidos totalmente actualizados, remasterizados, con una constante invitación al baile y la celebración. Los ingleses están en plena forma porque sonaron afiatados, la voz perfecta y el carisma innato de Simon Le Bon, John Taylor en el bajo, Nick Rhodes en teclados y Roger Taylor en la batería, apoyados por las bellas voces de Anna Ross y Erin Stevenson (estrellas del show), convirtieron esta hora de concierto en un evento de grandes proporciones para Lollapalooza.

Ojalá la organización acoja el mensaje, porque números de este tipo se extrañan, convocan a una variada multitud y son una apuesta a ganador.

Foto: Lotus

Setlist:

The Wild Boys
Hungry Like the Wolf
A View to a Kill
Last Night in the City
Come Undone
Notorious
Pressure Off
Planet Earth / Space Oddity
Ordinary World
I Don’t Want Your Love
White Lines (Don’t Don’t Do It)
(Reach Up for the) Sunrise / New Moon on Monday
Girls on Film
Save a Prayer

Rio

Macarena Polanco

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *