«Fuckin’ In The Bushes»: Snatch, un promotor de conciertos enojado y la mejor intro para un álbum de Oasis

«Fuckin’ In The Bushes»: Snatch, un promotor de conciertos enojado y la mejor intro para un álbum de Oasis

Oasis son reconocidos por canciones con coros grandilocuentes, melodías de estadios y un apego enorme al raigambre beatlesco, con un poco de afinación estridente en sus guitarras. Es por eso que es algo sorpresivo cuando le damos play a «Standing In the Shoulder of Giants», el álbum de la banda del 2000, cuando irrumpe «Fuckin’ in the Bushes» pateando la puerta con fuerza y ​​con una melodía algo punk rock sucia y de ritmo rápido. Y no tan propio de los hermanos Gallagher. 

Y fue realmente capturado con la esencia pura. La canción se tocó (grabó) en vivo y se usó con frecuencia como la primera canción en los conciertos de Oasis, sobre todo en su gira Don’t Believe the Truth Tour, reproducida en una cinta. 

Esa actitud de ring de boxeo no quedaría ahí solamente. Y sus links son más que interesantes: Contiene muestras tomadas de la película Message to Love – Isle of Wight 1970 de Murray Lerner y un discurso de Rikki Farr, quien había trabajado como mercenario en el Congo, antes de dedicarse a organizar festivales. De hecho, fue el maestro de ceremonias en el infame Festival de la Isla de Wight en 1970, donde hubo mucha desorganización y sufrió una especie de colapso en el escenario que lo llevó a lanzar este discurso venenoso que es lo que se escucha en la canción:  

“Les organizamos este festival a ustedes, bastardos, con mucho amor. Trabajamos durante un año para ustedes, cerdos. ¿Y quieren derribar nuestros muros? ¿Y quieren destruirlo? ¡Pues váyanse al infierno!”

Y quizá la reconociste mejor cuando apareció durante la escena culminante de la película Snatch, en la que un Brad Pitt irlandés tatuado (y en uno de sus mejores papeles) recibe una bofetada antes de que llegue su pandilla y… (dejémoslo ahí mejor para no hacer más spoiler). Pero es una de las escenas mas memorables del film, sin duda. 

El tema de hecho, es una arenga de actitud, de salir a escena, de empuje y además de servir de intro en conciertos para la banda, fue usada por el luchador profesional Nigel McGuinness como tema de entrada y se reprodujo cuando Oasis recibió su premio por Contribución Destacada a la Música, entre otras cosas. 

 

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