Grandes Portadas del Rock: Sepultura – «Arise» (1991)
Acostumbrados a recibir la influencia gringa y británica, era difícil que el metal surgido de este lado del continente no pudiera tener repercusión; sin embargo, ya a mediados de los ’80, los críticos y estudiosos más doctos del movimiento citaban la existencia de una banda brasileña que practicaba un “death-thrash” rápido y contundente: Sepultura.
“Arise” es el cuarto álbum de la banda y que marca sin duda alguna muchos cambios para el mundo metalero. Es un disco lleno de experimentaciones de altísima calidad, y que serviría de adelanto para lo que mostrarían los brasileños en sus siguientes producciones.
La portada de “Arise” fue diseñada por Michael Whelan (Ganador de 15 Premios Hugo, los Oscar de la Ciencia Ficción, e inducido al Salón de la Fama de la Ciencia Ficción en 2009) creando este dibujo en tonos naranjas, un ojo, dos fauces, dos pinzas y una especie de muralla de ladrillos, más una serie de detalles que parecieran que fueron colocados a medida que aumentaba el minuto de locura e inspiración. En el primer boceto, que está disponible en la web del artista, se observa una gran mano surgiendo desde el fondo de la tierra y rodeada de algo parecido a unas lápidas (relacionado al nombre de la banda) las que estaba rodeadas de fauces y ojos que, en el dibujo final, aparecerían como un todo unido. Observar la caratula puede dar como resultado las más variadas explicaciones: puede ser un escenario de ciencia ficción, género muy trabajado por el artista, o bien una nave interestelar con alienígenas, o bien la representación onírica de un mal sueño. La portada está impregnada de un magnetismo metafísico en cada detalle; se puede recorrer con la vista tantas veces como queramos y siempre vamos a descubrir una nueva impresión.
Sin duda que es una portada difícil de interpretar por su originalidad; si escuchamos el segundo track del disco quizás allí podría hacerse una relación con este dibujo, pero me la juego porque es una ejemplificación de Lovecraft porque es lo que conduce a la sociedad a obedecer las costumbres y reglas impuestas y que desembocan en caos, formando un monstruo con todos los elementos negativos de esta sociedad: envidia, codicia, enfermedades, corrupción, etc. Claramente, esta carátula es producto de la imaginación del artista quien, según el propio Max lo explicó en una entrevista, tomó algunas referencias de la literatura tan de moda en el Metal de esos años (Lovecraft); allí se entiende la incorporación de las ruinas y la forma del monstruo.
“Arise” es un grito desesperado (Desperate Cry), una ráfaga incontrolable de voces guturales y ensordecedoras, solos de guitarra magníficos y una percusión que se acerca a la perfección. No hay un minuto de respiro, no hay tema mejor que otro. El álbum es un todo. Por eso su portada no se ata a un concepto fijo, sino que está abierto a la interpretación que el auditor quiera hacer, ya sea desde el punto de vista del contexto histórico, de la literatura dominante, del contenido del mensaje en los tracks. Como inspiración es un trabajo impresionante.
