Los norteamericanos de Lamb of God se encuentran a punto de lanzar su nuevo disco…
Immolation saca su garra más aterradora en Acts of God (2022)
Nuclear Blast, 2022
Tanto tiempo ha pasado desde que nos sorprendieron con el imprescindible Dawn of Possession, un disco magnífico que selló el curso mundial del death metal y cambió los parámetros, tal como algunas películas se adueñan de una época y la vuelven clásica para ese género; si ese debut hubiera sido una película, podría haber sido El Exorcista, inolvidable aunque pasen los años, porque manifestó una propuesta cautivadora y perfecta que no tenía mucho que ver con el cine típico de terror.
Tras ese disco vinieron más gratas sorpresas de Immolation y ni siquiera la temida década 2000, cuando el género empezó a perderse ante la renovación generacional, les hizo dejar de alimentar la perfección técnica y oscura que les caracterizó. Este hecho quedó zanjado desde Majesty and Decay, con producciones de alta factura. Y nos atrevemos a plantear que Acts of God incluso las supera.
Este es un disco largo, pero que muestra a los neoyorkinos en estado de gracia, inspirados. Mientras que Atonement vio a Vigna y Alex Bouks diseñar guitarras en capas para construir una atmósfera inmersiva, este álbum se enfoca más en golpear el sistema nervioso, en crear agresión creativa para mantenerte dentro de la experiencia sonora. Y todos los temas van en esa línea, con complejos despliegues de riffs y punteos. ‘Derelict of Spirit’ es tremenda, ‘Let the Darkness In’ y ‘Broken Prey’ no bajan el acelerador en ningún momento. Ross Dolan ruge como si tuviera 20 años, un ejemplo no solo de calidad interpretativa sino que también de un músico que cuida su elemento de trabajo y lo fortalece, según se lo exige cada canción. Vigna y Bouks no muestran fisuras, no necesitan rellenos y Steve Shalaty se luce con esa percusión que permite el desarrollo fluido de los temas. ‘Noose of Thorns’ y ‘Shed The Light’ forjan su impacto con ritmos contundentes, mientras que ‘An Act of God’ es puro arte y luce uno de los solos más perfectos de Vigna. También están ‘Blooded’ y ‘Overtures Of The Wicked’, diseñados para aplastar y lo hacen sin esfuerzo. La secuencia entre ‘Immoral Stain’ e ‘Incineration Procession’ está muy bien lograda, ya que es melódica y con una atmosfera que resume bien el conjunto del álbum; y el black metal de ‘Incineration Procession’ no debe subestimarse, porque hoy en día es bastante difícil encontrar una pieza tan bien mezclada en estudio. Y ‘Apostle’ podría convertirse en un clásico, ya que es realmente oscura, es 100% sonido Immolation; pesada, explosiva, sonoridad inquietante, con energía oscura que se sigue repitiendo en la mente como un bucle.
El arte de los discos death metal son icónicos y las bandas invierten tiempo en eso. En el caso de Acts of God está mejor concebido que en Majesty And Decay y Kingdom Of Conspiracy, y se nota una mayor preocupación estética de Eliran Kantor, que crea una significativa pintura y que ya por eso, el vinilo es más que deseable.
No hay una banda death metal, hoy por hoy, que tenga la capacidad de Immolation y este disco los devuelve a las primeras planas y de manera justificada. Puro death insigne, maduro, donde cualquier fan del género encontrará material para regocijarse. Si el death sigue vivo es gracias a instituciones como Immolation , que nunca han dejado de perfeccionar su malévola propuesta artística.