King Gizzard & The Lizard Wizard en Lollapalooza Chile 2024: Ácido, dragones y energía cósmica
En el segundo show en tierras chilenas, la banda brindó un set corto pero intenso
Si hay algo que puede pulir a una banda hasta lograr el mejor de los resultados es tocar. Tocar, tocar y tocar, pero además si le sumas ser un melómano desatado, donde te gusta jugar, experimentar y explorar en distintos géneros musicales, ese brillo se torna incandescente…y muy trippy en este caso.
Así fue anoche en un show de lujo para cerrar la jornada rockera de Lollapalooza, donde los genios de Melbourne hicieron gala de todas esas horas de jams, experimentaciones microtonales, fantasías y juegos mentales surrealistas. además de un acentuado gusto por el metal en su particular visión, todo conjugado para un show que literalmente voló cabezas en el Alternative Stage a eso de las 21.00 hrs.
Pero, ¿Qué era lo triste? que solo teníamos un poco más de una hora para poder disfrutar de una banda que no ha parado desde su aparición en la década de los 2010’s hasta la fecha pariendo 25 discos y todo un universo: lanzando suites, discos conceptuales, canciones subdivididas y álbumes cíclicos que funcionan de forma alucinante. Así, en esa, igual zafaron al partir con uno de sus discos más preciados y sicodélicos como el «Im In your Mind Fuzz», de la cual desprendieron la mayoría de sus primeros temas (cuatro para ser precisos) y pegando otras joyas de «Polygondwanaland» como ‘Crumbling Casttle’ cuando el humo, ambiente, pantallas caleidoscópicas y cabezas extasiadas de marihuana y sicodelia creaban el mejor de los ambientes.
Con un Stu Mckenzie con polera de Los Jaivas (cuanta influencia hay de los chilenos en la música de la banda, lo hemos apuntado en nuestras reseñas) y con una actitud concentrada y distendida la mismo tiempo, la banda llegó a un punto en que fue capaz de pasar de un hilo musical a otro sin ningún reparo, es así como lanzan una sección metal con el que fue nuestro disco del año. «Petrodragonic Apocalypse…» con mosh desatados en la audiencia ante la magnificencia de cosas como «Dragon» o «Supercell» o incluso el potentísimo momento con «Hell» de su otro disco metal como el «Infest The Rats, Nest» (2019).
Pese a la reducción de tiempo vs. las más de dos horas de su sideshow KGLW salieron airosos mostrando pinceladas de su GizzVerse y de una discografía inmensa, la cual esperamos ver con mayor frecuencia por estos lados, quizá con shows temáticos por disco o con shows donde la variedad se a tan propia que no pueda dejar a nadie insatisfecho.