Kraftwerk en Chile: Viaje al país de las maravillas computarizadas

Los alemanes regresaron a Chile con su característica artificialidad retro computarizada en un sorprendente show en Movistar Arena

Fotos por Jaime Valenzuela, DG Medios 

Mientras más tecnológico y computarizado se vuelve el mundo a veces es bueno echar una mirada atrás. ¿Dónde arrancó todo esto? ¿Cuándo nos metimos a vivir en un mundo tan «computarizado»? Si nos remitimos a lo netamente musical la respuesta es una sola: Kraftwerk desde los setenta que venían advirtiendo que la tecnología, el uso de sonidos artificiales pero no menos sorprendentes iban a marcar la pauta hacia el futuro y así fue con el devenir de las décadas. Inventaron un género musical completamente nuevo que miraba fuerte y derecho hacia el futuro: Con una instrumentación que consistía únicamente en sintetizadores, fueron pioneros en el sintetizador «secuenciado» que permitía ritmos mecánicamente precisos. Y su creación y toda esta galaxia sónica ha sido recogida y con mucha generosidad por artistas que van desde Daft Punk, The Prodigy, Radiohead, Pet Shop Boys, Depeche Mode, Aphex Twin, Deftones, Björk a King Gizzard & The Lizard Wizard, y en prácticamente todo lo que escuchamos hoy.

Y en la práctica Kraftwerk podría ser la banda en vivo más aburrida de la historia: cuatro hombres alemanes viejos y sin mayor animación parados en fila detrás de sus estaciones de trabajo de sintetizador, con cero interacción con el público, pero en realidad, lo que hacen es brindar algunas de las experiencias multimedia en vivo más emocionantes, y lo de ayer fue un show muy dinámico, pues todo pasó tan rápido tras esas alucinantes capas de sonido y las espectaculares puestas visuales que ahí damos cuenta que su show es otro, y desde hace tiempo que está lejos de establecerse en los márgenes convencionales, sino como toda una aventura cinemática y conceptual. 

Álbumes y canciones como Autobahn y Trans Europe Express, estuvieron presentes para hipnotizar a un Movistar que bailaba cuando podían salir de los increíbles trances a los que nos sometía la banda. El escenario consistía en un telón de fondo de una  de las más alucinantes pantallas de cine que podamos ver  en show de estas características, y presentaba sus inmensas gráficas de tecnología retro pero altamente diseñadas, que nos iban pasando imágenes conceptuales de acuerdo a cada canción: los Robots, el Tren transeuropeo, el tour de Francia o incluso lograban conectarse a una especie de GPS para acusar su localización exacta y hacer aterrizar una nave alienígena en las mismas afueras del Movistar Arena. 

Cuatro podios de teclado negros que estaban alineados con una fina iluminación para un efecto similar a Tron, contrastando con sus trajes que se iluminaban de una manera particular, sus cuerpos desaparecían en la oscuridad mientras la cuadrícula blanca permanecía visible, convirtiéndolos esencialmente en modelos de estructura metálica de computadora. Todo sonaba perfecto, la maquinaria alemana en su epítome de precisión y el público así lo percibió, ovacionándolos en contadas ocasiones y mucho más, por supuesto, al final, donde estos números iban saliendo uno por uno. Y es que la experiencia Kraftwerk es única en su especie y no aplaudir espontáneamente de pie aquello era totalmente imposible. 

Setlist: 

Numbers / Computer World / Computer World 2
It’s More Fun to Compute / Home Computer
Spacelab
Airwaves / Tango
The Man-Machine
Electric Café
Autobahn
Computer Love
The Model
Neon Lights
Geiger Counter / Radioactivity
Tour de France 1983 / Prologue / Tour de France Étape 1 / Chrono / Tour de France Étape 2
Trans Europe Express / Metal on Metal / Abzug
The Robots / Robotronik
Encore:
Planet of Visions
Boing Boom Tschak / Music Non Stop