Lenny Kravitz en Lollapalooza Chile 2019: Cuando el oficio se impone
A pesar de no cerrar la noche, el show de Lenny Kravitz era punto alto del lineup de este primer día. Lamentablemente, desde el inicio los problemas de sonido fueron evidentes, algo que no es común en los espectáculos que monta una estrella consagrada como él. Cortes en medio de los dos primeros temas motivaron algunas silbatinas, lo que obligó al artista a suspender momentáneamente su presentación en la primera jornada de Lollapalooza.
Tras largos 30 minutos de espera, el neoyorquino retomó la escena y recurrió a un clásico probado para volver a encantar: “American Woman” y su fuerza bluesera dio cuenta del temple del artista, quien puso a disposición la experiencia de 11 discos y giras mundiales de absoluto éxito, lo que fue clave para desenredar la madeja y entrar con el show del Raise Vibration Tour que tan bien combina el rock, con el soul, el funk, y toda la propuesta sonora que le permite la excepcional banda que lo acompaña, donde destaca sin lugar a dudas la bajista Gail Ann Dorsey, compañera de una década en los shows de David Bowie y que ahora hace filas al incombustible Lenny, quien ataviado como en sus mejores épocas no da señales de que el tiempo ha pasado también por él. Pidiendo disculpas y prometiendo volver para cantar los temas que tuvo que dejar fuera («I belong to you» y «Again» se extrañaron), ya queremos que alguna productora pueda cobrarle la palabra.
Su versión para «Get Up, Stand Up», “It Ain’t Over ‘til It’s Over”, “Believe”, himnos de su discografía, más «Let Love Rule» y «Are You Gonna Go My Way» cerraron un corto pero efectivo set de 10 temas; Si le sumamos que dialogó con la gente, que sus músicos hicieron una excelente sesión de jam y que bajó del escenario para cantar junto a las primeras filas, la experiencia de esta mega estrella y su aceitada banda lograron sacar adelante un show impensado. Fueron 13 años de espera, pero valió la pena saltar junto a él los obstáculos que se presentaron porque, a pesar de todo, uno de los héroes del funk noventero igualmente se dio maña para dictar una clase de rock de oficio, esa que solo puede dar un tipo con ese porte, carisma y status.