Nacion Rock awards Parte II: Discos del 10 al 1
10. Opeth ‘Heritage’
Opeth regresa demostrando una vez más que no se necesita invocar a la gutural vocalización del talentoso Mike Akerfeldt para dar cuenta de un disco de alta factura. Esta vez los terrenos donde la banda realiza exploraciones son más experimentales que varias cosas hechas en el pasado y ese es su gran mérito para encumbrarse dentro de los mejores del año. Viajando desde un universo de atmósferas y bellos arreglos hasta coquetear seriamente con el rock progresivo setentero de cosas como Yes o Jethro Tull incluso. Un gran paso que ve a esta banda cada vez más alejarse de su cuna death metalera de principios de los noventa en pos de algo mucho más interesante.
9. R.E.M. ‘Collapse Into Now’
Bastante significativo este álbum para lo que fue este año para R.E. M. Quizá todos pensamos que este iba a ser el disco que le iba a traer nuevos aires a la banda en materia compositiva, ya que se trató de un excelente disco donde las melodías rememoraron en gran parte lo más destacado hecho por los de Athens , Georgia, en clásicos discos de principios de los noventa. Pero la noticia de la disolución definitiva fue un golpe fuerte, aún más considerando esta delicia de disco. ¿El broche de oro? En muchas partes se vio de esa manera. Un discazo, por donde se le mire, con invitados de lujo y que se sintió por doquier que este era el R.E.M. que hace tiempo estábamos esperando.
8. Alice Cooper ‘Welcome 2 my Nightmare’
La segunda pata de su clásico Welcome to my Nightmare de 1975. Pero esta vez complementándose con muchos invitados y lo mejor de todo: la participación de miembros originales de esa clásica placa como Michael Bruce, Dennis Dunaway y Neal Smith. No hay tendecnia sonora plana, el disco se adentra en cosas del glam rock setentero a lo T-Rex o Bowie, también mucha influencia beatlesca y de The Rolling Stones, la demencia electrónica ultra moderna y siempre con el toque siniestro que es la esencia de su primera parte de 1975 y del mismo Alice Cooper en realidad. Para no aburrirse bajo ningún punto.
7. PJ Harvey ‘Let England Shake’
Cada vez más sólida en su trabajo Polly Jean Harvey, esta vez inspirando su trabajo en un concepto muy propio de su país de origen , Inglaterra. Como ella misma dijo fue un trabajo de mucha investigación acerca de como se ha sacudido el país europeo con respecto a un historial tremendo de acontecimientos y participaciones bélicas. Musicalmente volviendo a lo suyo y dejando incursiones mas intimistas como lo último entregado. Un disco completísimo, que se nutre de múltiples ejecuciones de instrumentos del más distinto orden pero que conjugan muy bien un sonido muy propio de la artista, que se anota con un gran regreso.
6. Mogwai ‘ Hardcore Will Never Die But You Will’
Con un aplastante título la banda escocesa considerada de las pioneras en el post-rock se despacha un disco lleno de luces en muchos sentidos. Nos había quedado un gustillo a poco con su última producción del 2008 The Hawk is Howling. En esta ocasión logran reivindicarse con grandes canciones siempre en su casi lúdica forma experimental de componer, los efectos y voces extrañas como venidas de otro planeta complementan muy bien y lo más importante, el disco logra crear sensaciones oníricas y volátiles en la mayor parte de su contenido desplazándote por un viaje que da la impresión que no tiene retorno, o al menos así quisiéramos al escucharlo.
5. Mastodon ‘The Hunter’
La sorprendente banda de Atlanta, EE.UU. lanza un disco con un sonido impensado. El grandioso Crack the Skye (2009), que fue elogiado y con creces debido a su innovación estilística por terremos progresivos y melódicos, daba para pensar que la agrupación se mantendría por esos terrenos. Pero no fue así y dándole un giro considerable a su sonido, esta vez optan por mostrar un trabajo mucho más sicodélico y potenciado por las raíces del heavy metal, pero siempre con el sello Mastodon que convierte el estilo en algo muy creativo e innovador. La banda sigue demostrando seriamente que es una de las más importantes para el recambio del estilo en el presente. Gran álbum.
4. Primus ‘Green Naugahyde’
La vuelta a las raíces del Primus noventero es la consigna de esta placa. Algo que se logra de muy buena manera y aún más incorporando elementos sicodélicos, progresivos y space rock inclusive que hacen de este uno de los mejores discos de año. El regreso de Jay Lane en la batería es parte primordial en este asunto. La banda nos demiestra que todos los años de inactividad discográfica no han pasado en vano, el talento de Les Claypool tanto en materia compositiva como en su virtuosa ejecución de su instrumento se luce en prácticamente en todas las pasadas del álbum. Reconfirmándose como una de las mejores bandas del planeta y conservando la vigencia y originalidad que tanto los ha caracterizado.
3. My Morning Jacket ‘Circuital’
Es el disco del indie norteamericano del año. My Morning Jacket deja demostrado su capacidad para variar de estilos y en cada uno de ellos que manejan logran óptimos resultados. Un disco que se nutre de pop sicodélico, soul, funk, notables baladas y que, dicho sea de paso, toman directamente una brecha entre lo que habían venido haciendo para deslumbrarnos con algo mucho más íntimo, vanguardista pero sin olvidar su raíz country, de rock sureño americano y blues. Cada canción es distinta a la otra, aquí no hay parámetros fijos y eso hace del disco una maravilla.
2. The Black Keys ‘El Camino’
Ya casi cayéndose en el calendario de este 2011 The Black Keys lanza un disco que marca la diferencia en lo que se refiere a bandas de la última camada del revival rock setentero. Esta vez incorpora más elementos en su sonido logrando a plenitud un disco lleno de frescura y talento por donde se le mire. Aquí tenemos canciones renovadoras, baladas rock del mejor corte zeppeliano, incursiones innovadoras pop e infecciosas guitarras que hacen de este álbum una delicia. Sin duda es una de las bandas del momento y que ya se venía tanteando más o menos que iba a ser una de las grandes producciones del año. Quizá más que nunca los de Akron , Ohio, no fallan sino que todo lo contrario, el dúo la hace de nuevo y esta vez superan su misma marca autoimpuesta.
Y el disco del año:
1. Foo Fighters ‘Wasting Light’
Un gran disco para sellar un año completamente enorme para la banda comandada por Dave Grohl. La idea de hacerlo análogo resultó ser todo un éxito revitalizando ese sonido garage para lo cual parte fundamental fue el trabajo en la producción de Butch Vig , sellando el reencuentro y de alguna manera casi un homenaje a los años que pasó Dave Grohl por Nirvana. Un disco completamente rockero, sin baladas ni ningún tipo de concesión. Porlo demás la banda se preocupó de complementarlo haciendo prácticamente de todo, desde su emotivo documental ‘Back & Forth’, inmensas presentaciones en la mayoría de festivales masivos, especiales de TV y apariciones junto a diversos artistas. Una banda trabajólica e incansable que sin duda se hace total merecedora de todos los premios y elogios. Una banda de elite que da cuenta de que el esfuerzo y talento puede rendir los mejores frutos. Felicidades para ellos y para nosotros, por el deleite, por cierto.
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