Rancid en Lollapalooza Chile 2017: Un esperado debut, pero no en el lugar preciso
Fueron sentimientos encontrados lo de Rancid en Chile. La banda, con más de 25 años de carrera finalmente debutaba en nuestra tierra, algo que pudo haber ocurrido mucho antes la verdad, pero que por una y otra razón no se dio. Tuvo que ser el marco de un festival tan diverso como Lollapalooza el que los encajara en el set, haciendo de aquello uno de los números más atractivos del evento, pero muy resistido por sus fans puristas, que sin duda faltaron muchos.
Por eso quedaba claro, nos quedó la sensación de que ni la banda ni el público realmente disfrutó el momento, pues, muy similar a lo que pasó con Bad Religion el año pasado, un reducido grupo solo se dedicaba al mosh y a vibrar con cada una de sus canciones. Había mucha gente viéndolos, pero nunca se logró una conexión de ambiente apropiada para lo que Rancid ofrece: adrenalina, mosh, energía abrumadora con una cantidad de canciones clásicas de ese querido punk californiano del cual son uno de los grandes contribuyentes.
Hablamos de temas como ‘Ruby Soho’, ‘Roots Radicals’, ‘Timebomb’ por ejemplo donde el despliegue musical era asombroso. Se dice que el punk no está construido en base a buenos músicos, sino más bien obedece a una cuestión de actitud, pero Rancid son la excepción a la regla ya que tiene de los dos mundos, puesto que las habilidades de Lars Frederikssen, Matt Freeman y Branden Steineckert, sumadas al desplante vocal del ahora frondosamente barbón Tim Armstrong, hacen de este grupo una banda temeraria y musicalmente enorme en onda y técnica.
El show pasaba a mil por hora, pero seguía la incomodidad de ni siquiera sentirnos muy partícipes en él debido al ambiente. Rancid sí o sí debió haber estado en un show propio y eso anoche se notó. Cuando Armstrong hablaba de su llegada final a Chile después de tantos años, lo hacía con un poco de complicidad, ya que está claro para él mismo que este festival no es la mejor tribuna para hacerlo.
Claramente, la banda hizo su trabajo, nutrió su más de una hora de concierto con un set muy bien elegido, inclusive con algunas joyas como ‘Tenderlon’ y ‘Salvation’ del gran «Let’s Go»(1994), una dupleta acertada con ‘East Bay Night’ y ‘Last One to Die’ del «Let the Dominoes Fall» (2009) y también echó mano a su reciente disco con ‘Honor Is All We Know’ (2014). Los californianos dejaron claro su papel como herederos del sonido de The Clash por excelencia en vivo, pero en otro recinto, con su público más fiel, hubiese sido una verdadera fiesta de punk, ska y diversión más que asegurada.
Foto: Lotus
Setlist:
Radio
Roots Radicals
Journey to the End of the East Bay
Maxwell Murder
The 11th Hour
East Bay Night
Last One to Die
Dead Bodies
Salvation
Bloodclot
I Wanna Riot
Old Friend
St. Mary
Tenderloin
Olympia WA.
Honor Is All We Know
It’s Quite Alright
Fall Back Down
Time Bomb
Ruby Soho