Saldando deudas: Underoath en Chile
El grupo norteamericano hizo un contundente retorno tras 10 años obviando el caluroso clima capitalino
Una especie de puntapie inicial fue lo que hizo el grupo de post hardcore Underoath a la tanda de conciertos extremos que se vienen durante el 2024. Ante un frenético Teatro Teletón, el grupo comandado por Spencer Chamberlain nos ofreció una de las visitas más esperadas por los fanáticos del género, cuyo apogeo fue en la primera década del 2000. Y es que el show mantuvo durante aproximadamente una hora y veinte minutos a todas y todos los asistentes completamente pendientes de lo ocurrido en el escenario. El calor ni se sintió, también gracias a la climatización del recinto.
Con un retraso de 15 minutos y sin ningún telonero, el quinteto inició el set con ‘Take a Breath’, una canción de su último disco en promoción «Vouyerist» del 2022, el cual fue cálidamente acogido por la fanaticada. Como era de suponer, el grupo hizo un importante recorrido por sus discos más aclamados, siendo cortes de los ya clásicos «They are Only Chasing Safely» del 2004 y «Define the Great Line» del 2006 los que cubrieron mayor parte de la oferta. ‘In Regards to Myself’, ‘Writting on the Wall’, ‘Its Dangerous Business Walking Out your Front Door’ y ‘Reinventing your exit’ son solo algunas de las coreadas piezas que fueron ejecutadas con mucha energía y potencia.
Se resalta este punto final porque si algo distintivo hay en la puesta en escena, pese a lo sobria en indumentaria – ya que el grupo no utiliza amplificadores -, es que los cinco integrantes no dan tregua alguna a descansos ni a bajar la intensidad, moviéndose por el escenario y mostrando con clara euforia que disfrutan de lo que hacen. El percusionista y tecladista Chris Dudley y el guitarrista Tim McTague deben tenerlo claro. Una importante conexión se sintió con el público en la canción ‘Too Bright to See, Too loud to Heard’ del disco «Lost in the Sound of Separation» del 2008, la cual posee un tinte más melódico e íntimo y la que fue fuertemente vociferada.
En la recta final los asistentes hicieron directa alusión a la canción «When The Sun Sleeps», la que no estaba incluida en el set y la cual Spencer prometió tocar si volvían a visitar Chile en una próxima ocasión. Así que había que cerrar con más clásicos: ‘A Moment Suspended in Time’ y ‘A boy Brushed Red living in black and white’ fueron la despedida que se sintió escueta pero efectiva, agradeciendo al público más intenso de la gira según sus impresiones. Breves momentos para repartir uñetas, el setlist y firmar una guitarra posiblemente dieron por saldada una importante deuda con los fanáticos locales, quienes esperaron 10 años a que regresaran.