Tigran Hamasyan en Chile: historias poco convencionales

El músico armenio se presentó por primera vez en Chile en formato trío, dejando a la fanaticada con anhelo de más

Fotos: Cristián Calderón 

Sin duda lo vivido anoche fue una de las presentaciones más poco convencionales de música jazz fusion ocurridas en nuestro país. Y es que la dinámica y energía entregados es más propio de los conjuntos de rock que de los acérrimos al género mencionado previamente. Se podría señalar inclusive que en varios momentos, por lo grave y duro de los contratiempos y poli ritmos, que las influencias djent y del metal progresivo en Tigran Hamasyan se hicieron notar sin ningún tapujo. De hecho, después de una dilatada primera parte de presentación, fueron apareciendo los encores. Uno. Dos. Tres. Cuatro. Fueron cuatro veces las que el trío volvió al escenario ante la ovación del público, siguiendo sacando versiones del repertorio del armenio con ya más de 15 años de trayectoria.

A cargo de Raimundo Santander estuvo el número de apertura, quien realizó una presentación caracterizada por la interacción con el público y los juegos atmosféricos generados por efectos en la guitarra electroacústica como la eléctrica. Obviamente, tintes folclóricos en su particular propuesta de jazz, la que ha recibido actualmente buen recibimiento no solo en Chile, sino también en distintas partes del mundo.

A las 21.15 sale a escena Hamasyan junto al bajista Marc Karapetian y el baterista Arthur Hnatek, también jóvenes prodigios en sus respectivos instrumentos quienes acompañaron los juegos rítmicos y particulares juegos de escalas presentes en las teclas del piano. En su mayoría las canciones tocadas fueron del disco «The Call Within», publicado el año 2020 y el cual tuvo un aclamado recibimiento de la crítica especializada y los fanáticos. ‘Levitation 21’, ‘Old Maps’,  ‘New Maps’, ’37 Newlyweds’ y ‘Ara resurrection’ fueron algunas de las que sonaron en el primer segmento, donde se dio espacio a la improvisación y a los juegos rítmicos, dando inclusive un extenso solo de batería Hnatek que confirmó por qué es uno de los encargados de las baquetas más prolíficos de Suiza actualmente.

Clásicos empezaron a salir posterior al primer retiro del trio del escenario, quienes se preocuparon más de la ejecución que de interactuar con los asistentes. De hecho, pareciera que Tigran se dirigió con cierta timidez en algunas ocasiones a los oyentes, pero se le notaba muy cómodo por la respuesta y entusiasmo que se le brindaba ante cada tecla pulsada. 

‘The Apple Orchard in Sagmosavanq’, ‘Vardavar’ y ‘Entertain Me’, canciones de sus primeros trabajos fueron las que paulatinamente cerraron el show, en donde Tigran puso mayor énfasis también a cánticos y vocalizaciones de clara influencia de medio oriente, junto a silbidos que acompañaban las melodías que sellaron su particular y ecléctico estilo.

Aún quedan entradas para su presentación en Quilpue en el espacio Trotamundos hoy 25 de Mayo, así que si tiene la oportunidad de poder asistir a un poco habitual evento de esta taya en dicha localidad se sugiere que tenga la experiencia, es probable que salga encantado de lo entregado en sus sonidos que reflejan historias pocos convencionales.