Turnover en Chile: Del emo al indie, y del indie a la electrónica
Uno de los fenómenos de la música alternativa e indie de los últimos años ha sido el de los estadounidenses Turnover. Con una carrera discográfica que comenzó en 2011, la banda ha sabido mutar su sonido con cada lanzamiento de estudio, generando distintas bases de seguidores a lo largo de su trayectoria. Después de varios intentos fallidos de visitar Sudamérica, los oriundos de Virginia pactaron su debut en Chile para el próximo 9 de mayo en Club Ambar (Ernesto Pinto Lagarrigue 154#), en lo que promete ser una revancha y una excelente oportunidad para concretar, al fin, el conectar con su audiencia local tras la gestión de la productora Monkey. Pero, para quienes recién comienzan a conocer a la banda o, para quienes no la conocen en absoluto, preparamos este artículo con una mirada profunda hacia su evolución musical.
Una Exploración Constante
Si tuviéramos a los Turnover del 2011 frente a frente con los Turnover del 2024, sería difícil notar que son la misma banda. Su EP homónimo, publicado en 2011, estaba orientado a un sonido emo y garage donde se notaban ciertas similitudes a bandas como Fugazi, Mineral o Touché Amoré, con composiciones rápidas, voces agresivas y letras viscerales. Estas similitudes se mantuvieron en «Magnolia», el primer LP del conjunto, editado en 2013 y que, a diferencia de su EP predecesor, tenía voces un poco más suaves y limpias, con un énfasis en la preparación de las melodías vocales. Las críticas para el disco fueron favorables, y ya se notaba el potencial de la banda. Además, habían firmado con Run for Cover Records, lo que les entregaba un respaldo mayor para desarrollarse, concretar giras y el convivir con más bandas (de hecho, pudieron publicar un split con Citizen que, con los años, se convirtió en un muy buen ejemplo del buen momento que vivía el revival del emo en aquél entonces).
El salto e impacto real llegó con su segundo trabajo de estudio «Peripheral Vision», publicado en 2015. Sus composiciones pasaron a ser mucho más elaboradas, con voces trabajadas en detalle y un sonido más ligado al indie, con guitarras atmosféricas y tempos más controlados. El disco se volvió tendencia en internet y le significó a la banda el presentarse con mayor frecuencia en vivo, en distintos lugares y puliendo su performance. Su carátula, con tonos anaranjados y cubierta con ruido, también pasó a ser una imagen de culto en la escena, por lo que el álbum se conoce como uno de los puntos más altos de su carrera a la fecha.
Dos años después, llegaría un cambio radical en el sonido de la banda con «Good Nature». Una carátula colorida, ambientada en la naturaleza, sería el mejor complemento para un trabajo con canciones más alegres, donde las guitarras mantienen el sonido brillante de del disco anterior, pero que se presentan en clave indie/pop. Los coros pegadizos también abundan a lo largo de la placa, lo que produjo una apertura hacia públicos más amplios y que no necesariamente disfrutan del emo o de sonidos como el de sus inicios.
De ahí en adelante, la banda se ha centrado en mantener una senda más cercana al pop, pero fueron los sintetizadores los que han obtenido protagonismo en sus dos últimos trabajos, «Altogether» (2019) y «Myself in the Way» (2022). Estructuras de composición más radiales y elementos como el autotune, mezclado con guitarras ochenteras, llevan el trabajo de Turnover a un lugar más accesible y moderno. Elementos más novedosos para su paleta de sonidos, como saxos y vientos, otorgan más colores a su obra. Por otro lado, la banda ha declarado que, en esta etapa, pretende entregar un mensaje optimista y sensaciones positivas, y eso se refleja en su sonido.
Show en Vivo
A pesar de todas estas exploraciones, la banda incluye en sus setlists material de sus trabajos más destacados, por lo que hay espacio para presenciar en vivo extractos de gran parte de su trayectoria. Se mezcla lo nuevo con lo viejo, y eso siempre suma un valor agregado a cualquier concierto.